Cap 18 - La tortura del comisario

Capítulo 18 - La tortura del comisario

ENTRADA:


En la cabaña abandonada.
Darío llega en el coche. Estaciona el coche y se baja. Va hacia la cabaña. Enfrente de la cabaña estaban Alfredo, Angel y Jota. Darío se acerca a ellos.
DARIO : ¿Dónde está?
ALFREDO : Adentro.
DARIO : ¡Gracías! Hicieron muy buen trabajo.
(Darío entra en la cabaña abandonada secundado por Alfredo, Angel y Jota el último. Ve todo asqueroso por allí, pero ni modo, tiene que avanzar.)
DARIO : ¡Que asco!
(Darío se acerca al comisario. Lo ve desmayado.)
DARIO: (a Alfredo y a Angel) ¡Despiertenlo!
ANGEL : (a Alfredo) ¡Dejame a mí!
(Angel va por una cubeta con agua fría y la tira encima del comisario. El comisario Juan se despierta aturdido.)
JUAN : ¿Qué hago aquí?
DARIO : (a Jota) ¡Préstame tu capucha!
(Jota le da su capucha negra y Darío se la coloca en la cabeza rápidamente. Va con el comisario, enfrente de él.)
DARIO : ¡Ay ay ay! Mi querido comisario! Aún no aprendió que meter las narices en donde no le importa no es bueno ni para usted ni para su familia!
JUAN : (con odio; tenía los ojos cubiertos) ¿Quién eres, cobarde? ¡Desamarrame y quitame esto de los ojos! Peleemos en igualdad de posicion!
DARIO : ¡Callese! Usted se está metiendo dónde no lo llaman! Y alguien tiene que ponerle un freno!
JUAN : ¡Maldito! Eres Darío San Roman! De eso no me cabe la menor duda!
(Darío les hace una seña a Alfredo y a Angel para proceder con los golpes. De repente, el comisario recibe un golpe en el estómago. Empieza a toser.)
JUAN : ¡Ahh! (no tenía ni como doblarse porqué sus manos estaban amarradas a la silla por detras)
DARIO : ¡Vamos! Empieze a hablar lo que sabe!
JUAN : (lo mira con odio) Lo que sé ¿sobre qué?
(Darío les hace una nueva seña para que le den nuevamente y más duro.)
DARIO : Ya mis amigos le refrescaron la memoria asi que ¡hable! ¿Por qué mierda abrió el caso de Natalia? ¿Quién se lo pidió?
(Darío estaba más que furioso.)
JUAN : No se de que me habla…
(Darío enfurrece más y les hace una nueva seña.)
DARIO : ¡Peganle más duro! No le bastó los anteriores golpes, necesita que le refresquemos la memoría nuevamente!
JUAN : ¡Noo! ¡Ya no!
DARIO: ¿Se decide hablar?
JUAN: (desesperado) No tengo nada de que hablar. Nadie me pidió retomar el caso. Creanme!
(El comisario empezó a botar sangre por el labio y por la naríz.)
DARIO : (les hace nueva seña) ¡Procedan!
(Los muchachos golpean nuevamente y más fuerte al comisario. Darío estaba más que furioso.)
JUAN : Me pueden golpear hasta matarme, pero no voy a revelar nada! ¡Absolutamente nada! Un cobarde imbécil como tú, Darío San Roman, no merece estar libre… y tampoco vivo.
(El comisario estaba golpeado demasiado brutal y ya estaba al suelo caído de la silla, con las manos amarradas detras suyo y los ojos bendados.)
DARIO : Jajaja… (rísas) no creo que estás en condiciones de amenazar, desgraciado!
JUAN : ¿Qué me vas hacer? Si me vas a matar, hazlo de una vez!
DARIO : Jajaja… no me pienso ensuciar yo mismo las manos con tu sangre. Otros serán los que pondrán fin a tu maldita vida. Y eso cuando yo quiera!
JUAN : (mira en dirección hacia donde oyó la voz de Darío) Cuidate mucho! Que si logro salir de aquí, tú no disfrutarás más de la libertad.
DARIO : Jajajaja… (rísas) tú sí vas a salir. Pero con los pies por delante.
JUAN: (pierde la paciencia) Ps si me vas a matar, matame de una vez! Pero no lo haces porqué no eres más que un cobarde!
(Darío enfurrece más y les hace una nueva seña a los muchachos. Alfredo y Angel golpean nuevamente al comisario. El comisario, después de tantos golpes, ya está empezando a sentirse mal y se desmaya. Jota se asusta pensando que ya está muerto. Darío estaba de pie al lado de Jota viendo como Alfredo y Angel hacen los trabajos sucios.)
JOTA : Se está mu-riendo, patrón. Sí. Creo que el comi-sario está muerto ya.
DARIO : Ese imbécil tiene que estar muerto! Si aún está vivo me puede denunciar. Sabe demasiadas cosas.
(Alfredo y Angel dejan desmayado al comisario y se acercan a Darío.)
ANGEL : ¡Listo el trabajito!
DARIO: Muy bien. Ahora uno de ustedes tiene que quedarse con él. Este imbécil no debe despertar. Si lo hace estoy hundido.
ANGEL: ¡Tranquilo, papá, no creo que lo haga!
DARIO: De todas formas! Yo ya me voy. Uno de ustedes que se quede con él.
ALFREDO : Está bien, patrón.

DARIO - MALTRATA AL COMISARIO


COMISARIO JUAN - NO REVELA NI UN SECRETO


* * *
De noche.
En un bar de mala muerte, un bar de travestis.
Se ve entrar a alguien, solo se le ven los pies. Se acerca a la barra, arregla su vestido y se sienta. Pide un coctail margarita y se queda allí sentado o sentada, abanicandose, esperando algun cliente. Un hombre se le acerca.
HOMBRE : ¡Hola, guapa! ¿Te apetece un momento apasional?
(El hombre le toca la pierna. En ese momento se le empieza a ver la cara a quien entró al bar. Éra Bruno. Vestía una peluca rubia, un vestido rojo pasión, zapatos con tacones no tan chiquitos, no tan grandes, uñas falsas grandes y pintadas etc.)
BRUNO : ¡Por supuesto!
(Bruno jala hacia él a ese hombre besandolo apasionadamente.)

BRUNO - ¿TRAVESTI?


-Música incidental (solo escuchar la canción)-


* * *
Mansión Escandon.
Habitación de Fabiola y Bruno.
Nuevamente Fabiola está enojada por la ausencia de su marido. Se levanta de la cama, va al closet y saca aquella maleta, la pone en la cama y la abre. La ve vacía, la peluca ya no estaba allí.
FABIOLA : ¡Maldita sea! Mis sospechas éran ciertas… (se pone pálida) Mi marido es… travestí…

* * *
Delegación de policía.
A mitad de la noche, Alejandro, espantado porqué su padre no aparece, instiga a los demás policías de ir a buscar al comisario Juan.
ALEJANDRO : No me importa! Lo buscan por afuera de la ciudad hasta que lo encuentren! Tengo mis sospechas de que se trata de un secuestro. Mi padre tiene que aparecer! Acosta, tú vienes conmigo!
ACOSTA : Sí, señor.
(Todos los demás policías se van. Alejandro y Acosta se van hacia el bosque.)

* * *
Mansión Riquelme.
En el salón, están Samuel y Alex platicando. Baja Jessica. Daniel sale de la biblioteca.
DANIEL : ¡Hola, papá! ¡Hola, Alex! (se sienta en un sillón) ¿Qué pasó?
JESSICA : (baja) ¡Hola, mi amor! (va con Alex y le da un beso)
ALEX : (le corresponde) ¡Mi amor! ¡Te vez divina!
JESSICA : ¡Gracías, cielo!
(Jessica se sienta al lado de Alex. Alex le toma la mano en la suya.)
SAMUEL : (a Daniel) ¿Y tú? ¿Cuándo me darás una grata sorpresa y me presentes a tu novia?
DANIEL : (suspira) No lo sé, papá… quizás núnca encuentre la mujer ideal.
JESSICA : ¡No digas esas cosas, hermanito, ya verás que va aparecer la chica que te robe el corazón!
SAMUEL: Deberías salir a divertirte más! En tu oficina, en la empresa, núnca vas a conocer a nadie.
ALEX : Bueno… mejor platiquemos de otra cosa! ¿Qué les parece si salimos los tres?
DANIEL : (mira con ternura a Alex) Noo… no quiero ser mal tercio. De hecho, prefiero terminar unos informes que tengo que entregar mañana.
JESSICA : Como quieras…
DANIEL : ¡Buenas noches! Y que se diviertan!
(Daniel se levanta y se va.)
JESSICA : Yo voy a arreglarme! Ya vengo, mi amor!
(Jessica se levanta, le da un beso a su novio y se va.)
ALEX : Bueno… como quedamos solos, me gustaría hacerle una pregunta.
SAMUEL : Cláro, ¿de qué se trata?
ALEX : ¿Usted conoció a una tal Natalia Uribe?
(Samuel abre los ojos como platos y queda asombrado.)

-Música incidental (solo escuchar la canción)-


SAMUEL : Sí… ¿por qué lo preguntas?
ALEX : Porqué hoy cuando llegué del colegio, mi papá recibió un citatorio para declarar sobre el caso de una tal Natalia Uribe.
SAMUEL : ¡Ahh! Ps sí, mi esposa y yo también recibimos unos citatorios. Natalia Uribe éra una amiga de todos.
ALEX : ¿Éra? ¿Murió?
SAMUEL : Sí, desgraciadamente murió cuando estuvimos todos en las Bahamas. Su muerte hasta ahora ha sido un misterio. En aquél entonces la policía demostró que fue un suicidio, pero yo estoy completamente seguro que se trata de un asesinato.
ALEX : ¡Ahh!
(Baja Jessica.)
JESSICA : ¡Ya estoy lista, mi amor! ¿De qué hablaban?
SAMUEL : (sonríe) Nada, tonterías, hija… ¡Pero que linda estás!
JESSICA : (lo abraza y le da un beso) ¡Gracías, papá!
SAMUEL : ¡No se tarden!
ALEX : Cláro que no, señor.
(Alex y Jessica se van.)
SAMUEL : ¡Dios mío! ¿Qué pasará con el caso de Natalia?
(Samuel lo dijo estando de pie y acarisiando un vaso de whisky.)

* * *
Cabaña abandonada, en la montaña.
Angel, Alfredo y Jota se quedaron con el comisario, quien ya había perdido conocimiento. Se oyen las sirenas de los coches de policía.
ANGEL : ¡Mierda! La policía… (se levanta con la pistola, listo para atacar)
JOTA : Y ahora ¿qué hacemos?
ANGEL : Lo único que podemos hacer es atacar.
(Angel les da a todos una pistola. Los tres salen afuera para esconderse y esperar a la policía para atacar. Dejan al comisario desmayado y golpeado, amarrado a la silla. La policía llega al lugar de los hechos. Primero se bajan Alejandro y Acosta apuntando hacia la cabaña. Los demás policías rodean el lugar. Alejandro se acerca a la cabaña para entrar, sin dejar de apuntar con el arma. Detras de unos árboles se escondían Alfredo con Angel y con Jota. Se oyan ruidos de entre los árboles. Hablaban despasito.)
ALFREDO : ¡Dispara ahora! Primero tenemos que despistarlos!
ANGEL : ¡Vaya inteligencia…! Si disparo ahora se darán cuenta dónde estamos.
ALFREDO : Mejor empezemos un fuego y ya! Cuanto antes, mejor!
(Alfredo coge su arma, se levanta un poco como para mirar a los policías y le dispara por detras a un policía. Éste cae al suelo. Alfredo se agacha. Los policías voltean y empiezan a disparar hacia los árboles. Empieza un intercambio de disparos. Mientras los tres y los policías disparaban, Alejandro entra en la cabaña a buscar a su padre. Dentro de unos minutos, Alejandro logra sacar al comisario todo golpeado y quien no podía caminar, estaba apoyado en su hijo. Afuera, aún se disparaban. Angel dispara hacia unos policías, y sin ver adónde dispara, la bala le llega al comisario en el hombro. Fue la gota que derramó el vaso porqué los demás policías corren hacia adónde estaban los chicos. Los tres empiezan a correr para que la policía no los pueda rastrear. Cuando corrían, Alejandro enfurrece, coge un arma y dispara hacia el agresor de su padre. En ese momento, Angel cae al suelo sangrando por la espalda. Tenía tres balas en la espalda y sangraba sin parar. Jota se asusta, pero Alfredo se lo lleva rápidamente en la moto. Darío ya se había ido. La moto con Alfredo, Jota y el cuerpo de Angel arranca dirigiendose a toda velocidad a la ciudad.)

ANGEL - QUIZAS ESTA MUERTO...


* * *
Departamento de David.
Daniela y David están abrazados, en el sofá, viendo una película. De pronto, Daniela siente algo y se toca el corazón. David la mira preocupado.
DAVID : ¡Mi amor! ¿Qué pasa? ¿Te sientes bien?
DANIELA : (se recupera) Sí… ya estoy mejor. Tengo un presentimiento. Como que algo malo puede pasar…
DAVID : (la abraza) ¡Ya, mi amor, vamos mejor a dormir! ¿Sí?
DANIELA : (se abraza a él) Está bien, mi amor, vamos!
(David se levanta y coge en sus brazos a la mujer que ama, le da un beso y se la lleva hacia la recámara.)

* * *
Mansión San Roman.
En el comedor, Darío está cenando. Coge el vaso de whisky y lo levanta sonriendo satisfecho como si quiería brindar.
DARIO : ¡Ojalá y ese maldito comisario esté muerto!
(Cuando está por llevar la copa con whisky a la boca para tomar, siente un dolor en el corazón y se le escapa la copa al suelo. En ese momento, viene la sirvienta.)
SIRVIENTA : ¿Pasó algo, señor? (notandolo aún mal) ¿Se siente bien?
DARIO : (se repone) Sí, sí, no te preocupes! {Pensamiento : ¿Qué puede estar pasando?}
* * *
Enfrente de la mansión.
Llegan Alfredo y Jota en la moto.
ALFREDO : ¡Tenías que haberte quedado al hospital!
JOTA : ¡No podía! ¿Entras?
ALFREDO : ¡Entra tú! Si entro yo, seguramente me va a correr. No soy santo de su devoción, y si le doy semejante noticia me fusila directo!
JOTA : Está bien.
(Jota toca el timbre. La sirvienta le abre, y Jota no tiene paciencia para explicarle quien es, entra directo a la mansión. Ve a Darío en el comedor y entra. Se queda de pie enfrente de él. Darío lo mira y se levanta.)
DARIO : ¿Qué quieres? ¿No has aprendido que en una casa decente primero tienes que esperar a que el patrón te diga si puedes entrar o no?
JOTA : Es cues-tión de… vi-da o muer-te.
DARIO : (suspira) ¿Qué pasa?
JOTA : Su hijo se está mu-riendo.
DARIO : ¿¿QUEEEE???
JOTA : Su hijo se está muriendo, señor.
DARIO : Eso oí perfectamente! Pero ¿cómo rayos…? ¿Qué pasó? ¿Dónde está mi hijo?
JOTA : Está en el hos-pital. Venga con noso-tros!
DARIO : ¡Vamos!
(Darío se va al auto. Jota se sube con él.)

* * *
Mansión Riquelme.
Ya terminó la pelicula y Alex trae a su casa a Jessica. Dentro del coche de Alex.
ALEX : Sabes… bueno, no es el momento adecuado, pero te quiero pedir algo.
JESSICA: ¿Qué, mi amor?
ALEX: (saca un anillo del maletín que estaba enfrente del coche, allí dónde se guardan ciertas cosas que tienen que ver con el coche, y que está frente al asiento del pasajero de la derecha; abre la cajita) ¿Quieres casarte conmigo?
JESSICA : Cláro que me quiero casar contigo.
(Jessica sonríe. Alex se acerca y le besa.)

ALEX Y JESSICA - SE VAN A CASAR


* * *
Al hospital.
Angel estaba en Terapia Intensiva, conectado a los aparatos. Al hospital entran corriendo Darío, secundado por Jota. Va hacia una enfermera recepcionista.
DARIO : ¡Buenas! ¿Dónde está mi hijo? Lo trajeron con urgencia al hospital hace rato.
ENFERMERA: ¿Cómo se llama su hijo?
DARIO : Angel San Roman.
ENFERMERA: (buscando en una computadora) Sí, efectivamente está ingresado aquí. De momento no le puedo dar más detalles. Tendrá que hablar con el médico. Aún no salió del quirofano. (vuelve a sus asuntos)
DARIO: Gracías…
(Darío se va a la sala de espera. Pega unos puños en la pared.)
DARIO : ¡Maldita sea!
JOTA: (se acerca a él; sin saber que decir) Lo siento mucho…
DARIO : ¿Cómo llegó a suceder esto? De ustedes tres ¿por qué permitieron que mi hijo quedára? ¿Por qué no te quedaste tú? ¿Por qué no se quedó ese maricon? (desesperado)
JOTA : Entiendo su deses-peración, pero… su hijo in-sistió que-darse.
DARIO : Ahora quien sabe si se salva o no. (se levanta y saca su celular) Voy a llamar a mi esposa. Por lo menos si no quiere saber nada de mí, a su hijo no podrá abandonar.
(Darío se aleja un poco. Alfredo se acerca a Jota.)
ALFREDO : ¿Qué pasó?
JOTA : Parece que aún lo están o-perando. Parece que le duele mucho a su padre.
ALFREDO : Éra de imaginarse…

DARIO - ¿DESESPERADO?


JOTA - EL MAS PACIFICO


* * *
Departamento de David.
Daniela y David están abrazados, dormidos plácidamente, después de hacer el amor. Cuando suena el telefóno de Daniela. Éra Darío. Daniela despierta, se levanta un poco del pecho de David, mira la pantalla de su célular, ve que se trata de Darío y rechaza la llamada. Vuelve a acostarse en el pecho de David. David despierta.
DAVID : ¿Qué pasó, mi amor? ¿Quién llamó?
DANIELA : Darío, mi amor… pero no quiero hablar con él.
DAVID: Ps deberías, cielo. Quien sabe si no se trata de algo importante?
DANIELA : Hm… para él un tema importante es la cama. Seguramente Inés lo plantó y me quiere a mí para calentarle la cama.
DAVID : Lo puedes saber solamente si contestas la llamada.
DANIELA : ¿Puedo? (con carita de bebé)
DAVID : (sonríe) Cláro, tontita jejeje.
(El célular de Daniela vuelve a llamar. Daniela contesta.)
DANIELA : ¿Bueno?! ¿Qué quieres, Darío?
DARIO : Sé que estás en la cama con tu amante. No os quiería interrumpir si no se trataba de algo grave.
DANIELA : ¡Dejate de tonterías y dime que es lo que pasa!
DARIO : Estoy en el hospital. Nuestro hijo está muy mal. Parece que le dispararon.
DANIELA : (pálida) ¿QUE??
DAVID : (la mira) ¿Qué pasó?
DARIO : Nuestro hijo está grave en el hospital. Cláro, eso si te interesa. ¡Adiós!
(Darío cuelga.)
DANIELA : Pero… Bueno? Darío?
(Daniela cuelga también.)
DAVID : ¿Qué pasó, mi amor? ¿Qué te dijo?
DANIELA : Angel está muy grave en el hospital. Le dispararon.
DAVID : Ps… ¡vamos al hospital!
DANIELA: ¡Gracías por estar conmigo!
DAVID : Sabes porqué lo hago.
(Los dos se abrazan. David la besa. Después se levantan y se arreglan para ir al hospital.)

DARIO SE INTERPONE ENTRE DANIELA Y DAVID




* * *
Al hospital.
El doctor aún no salió del quirófano. Darío regresa con Jota y ve a Alfredo.
DARIO : ¿¿Tú?? ¿Qué haces tú aquí?
ALFREDO : Lo siento mucho, mi amigo está internado y tengo todo el derecho del mundo de estar aquí. Lo que a usted no le da ese derecho…
DARIO: ¿De qué hablas? Te recuerdo que soy su padre, mariconcito!
ALFREDO : ¿Ah sí? ¡No lo sabía! ¿Un padre que manda a su hijo asesinar y torturar a otras personas? ¿Ese es un padre? Ps dejeme decirle que está muy equivocado.
DARIO : ¿Ah sí? ¿Y tú de qué lado estás, mariconcito? Porqué te recuerdo que tú también participaste en este operativo. Tú también estás involucrado. Y hasta al cuello.
ALFREDO : ¡Lo sé! Pero yo lo hago con un propósito. Su hijo, solo por el odio que le tiene. Y porqué quiere demostrar que es mejor que usted. Le recuerdo que nosotros sabemos todo sobre su pasado. Usted también fue sicario, como nosotros.
DARIO: (enfurece y va hacia él llevandolo hasta la pared) ¡Callate! ¡No lo vuelvas a repetir!
ALFREDO: ¿Qué? ¿Tiene miedo a que todo el mundo se entere de la clase de basura que fue usted? Más bien… que todavia ES?
DARIO : ¡Callate, maldito maricon! (se quita su saco aún lado dejando revelar su pistola) ¡Callate o te mato aquí mismo! (le dijo al oído)
ALFREDO : Jajaja… usted no tiene pantalones! A ver si se atreve matarme aquí, frente a todo el mundo. ¿Por qué? ¿Por qué me enredé con su hijo? Ps lo hize con un propósito. ¡Y eso no se lo voy a revelar!
(La atmosfera está bastante tensa. Vienen David con Daniela.)
DANIELA: (va con Darío) ¿Qué pasó? ¿Dónde está mi hijo?
DARIO : Aún no lo sacaron del quirofano. El maldito médico de cuarta no quiere salir.
DAVID : ¡Voy a ver que pasa! (le toca los hombros a Daniela) ¡Ya regreso, mi amor!
(David va a obtener permiso de entrar al quirofano. Daniela se queda con Darío. Se deja llevar por el aún amor que alguna vez le tuvo y que aún no ha desaparecido y se abraza a él llorando. Darío la abraza fuertemente a su pecho.)
DARIO : Mi amor… sabía que ibas a regresar!
(Daniela se abraza a Darío. Quizás el amor que se tuvieron aún no desapareció. Minutos después, sale el médico que operó a Angel, secundado por David. El médico se acerca abatido a Daniela y a Darío.)
DARIO : ¿Qué pasó, doctor? ¿Cómo está mi hijo?
MÉDICO: ¡Lo siento mucho! No quiero ser portador de malas noticias, pero… (suspira)

¿DARIO SE APROVECHARA DE LOS MOMENTOS DE DEBILIDAD DE SU ESPOSA?


Avances del próximo capítulo:
Al hospital.
DANIELA : ¿Qué pasó, doctor? ¿Qué tiene mi hijo? ¿Murió…? (llorando)
DARIO : ¿Pero qué, doctor? ¡Hable ya!
MÉDICO : ¡Lo siento mucho, señor San Roman, pero...
¿Qué será lo que el doctor les dirá a Daniela y a Darío? ¿Habrá muerto Angel?
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