Bandida 001 y 002: Eres mi paga [Estreno]

Recuerdo del primer mensaje :

Miami, llamada coloquialmente como la Ciudad del sol, sinónimo de buen gusto, exclusividad y opulencia. Los rascacielos se elevan junto a la bahía, las mansiones de artistas a la vista de los turistas, los coches deportivos desfilan por las calles y los yates y boutiques de renombrados diseñadores le imprimen un aire surrealista a esta ciudad donde hoy en día se habla más español que ingles pues la comunidad latina ha ido conquistando la ciudad del sol, convirtiéndola en un escenario ideal para vacacionar o vivir plácidamente teniéndolo todo.



INT. / WINNER HAND CASINO / DIA





El Winner Hand Casino es uno de los mejores y más prestigiosos de la ciudad, cuenta con una amplia variedad de máquinas tragamonedas, mesas de Blackjack, Póker, Baccarat, Three Card, Español 21, Pai Gow  y muchos más.  Su dueño es el afamado empresario Leonardo Mendez.


Todos juegan normalmente, excepto por un extraño cliente que se ha salido de control…





-ALBERTO: ¡Tengo que salir de aquí! (Saliendo apresuradamente del Casino)

-LEONARDO (Hablando con su hombre de confianza): ¡Paco! ¡Ve tras Alberto! Y lo llevas al lugar secreto.

-PACO: ¡Como ordene!, señor…


Alberto se sube a su coche y arranca despavoridamente, Paco va tras Alberto en otro coche.


-ALBERTO: ¡Dios mío! ¡Es Paco!

-PACO (Al volante): ¡No te escaparas!, ¡Viejo borracho!

-ALBERTO (Esquivando un coche de comidas rápidas): ahhhhhhh ¡Quítate de mi camino!

-PACO (Pisando el acelerador): ¡Ya te dije que no escaparás!





-ALBERTO (Aumentando la velocidad): ¡Perderé de vista a ese matón! (Mirando por el retrovisor) ¡No puede ser! ¡Está muy cerca!

-PACO: ¡Detente! (Sacando su revolver por la ventana)  ¡Viejo loco! (Disparando a los neumáticos)


Los transeúntes al ver la situación entran en pánico y se escuchan sirenas de policía.


-PACO (Devolviéndose): ¡Maldita sea! ¡Es la policía!

Paco se aleja y el coche de Alberto se detiene al explotar los neumáticos por los disparos de Paco, el comisario de Policía baja de la patrulla para interrogar a Alberto.





-FULGENCIO: ¿Qué pasa?, señor… ¡Porque conduce a esa velocidad!

-ALBERTO: ¡Ayúdeme! ¡Me están persiguiendo!

-FULGENCIO (Viendo que no hay nadie): No hay nadie sospechoso, señor.

-ALBERTO: ¿Acaso no escuchó los disparos?

-FULGENCIO: ¡Solo veo que sus neumáticos han estallado! (Entregándole una tarjeta)  Soy el comisario Fulgencio García.  (Subiéndose a la patrulla) Si necesita algo solo avíseme. (Pensando: Dejan conducir a estos viejos locos) (Se va)

-ALBERTO: ¡Espere! ¡No se vaya!

-PACO (Apareciendo de sorpresa): Sal del coche (Apuntándolo con su arma)





-ALBERTO: ¡Baje esa arma! ¡Por favor!

-PACO (Bajando a Alberto a la fuerza): Ahora sube a mi coche ¡Muévete! ¿Pensaste que las deudas de juego no se cobraban? ¡Soberano Imbécil!



INT. / MANSION ALTAMIRANO / DIA





En esta fabulosa y moderna mansión residen los Altamirano, dueños de un consorcio de turismo, Alberto Altamirano es el patriarca de la familia y vive aquí junto a su esposa Mónica De Altamirano, sus hijos Daniel de 23 años, Lucrecia de 22 y el pequeño Junior de solo 7 años.


La hermosa Lucrecia sale del baño, acaba de darse una refrescante ducha, y está envuelta en una toalla que le cubre casi todo el cuerpo.





-MONICA (Con una copa en la mano): Vaya, hija… pareces una monja.

-LUCRECIA (Sonríe): Bien sabes que no me gusta el exhibicionismo (Viendo la copa) ¿No te parece que es muy temprano para beber? (Molesta)

-MONICA: Es solo un poquito de Whisky. Tu padre bebe a boca llena y a él no le dices nada.

-LUCRECIA: Si él lo hace no tienes por qué hacerlo tú.

-MONICA: Me siento sola a veces… (Triste) Tú ya te vas a la universidad, tu padre no mantiene en casa...

-LUCRECIA: Mi papá debe estar en el consorcio de turismo ¿No?

-MONICA: Junior en la escuela… y el vago de Daniel ¡quién sabe dónde está! Siempre me quedo sola.





-CHABELA (Que escuchaba la conversación): Pos señora, para eso me tiene a mí.

-LUCRECIA (Risas): Tú siempre escuchando las conversaciones ajenas…

-MONICA: Ve a fregar los platos, Chabela.

-CHABELA: Con permiso (Se va)

-LUCRECIA: Tranquila mamá, mi hermano es un hombre de bien.



INT. / NIGHT CLUB / NOCHE





Este Night Club queda debajo de las instalaciones del WINNER HAND CASINO, en él se lleva a cabo muchas actividades ilícitas, prostitución  y venta de drogas. Es totalmente privado, no todos pueden entrar a él.


Las exóticas bailarinas se mueven en el tubo para sus clientes… y Daniel “El hombre de bien” es uno de ellos…


♪  ♫ ♪  ♫ ♪  ♫ ♪  ♫ ♪  ♫ ....


-PRESENTADOR: ¿Se divierten?

-PUBLICO: ¡Siiiiiiiiiii!

-PRESENTADOR: ¡Entonces alisten sus ojos para seguir observando a las espectaculares: ¡PAMELA! ¡ESMERALDA! Y ¡PRINCESA!




-ESMERALDA (Moviéndose al ritmo de Gimme More de Britney Spears): ¡Uff me encanta esto!

-PAMELA (Bailando en el tubo): ¡Gimme Gimme! ¡More! ¡Oh yeah!   ♪  ♫ (Moviendo las nalgas)





-DANIEL (Gritando desde la mesa): ¡Te amo Pamela!

-PAMELA (Ignorando a Daniel): ¡Gimme Gimme! Oh oh oooooooooooooh





-DANIEL (Acercándose a la tarima)  ¡Tengo dinero! (Metiendo billetes en los calzones de Pamela)

-PAMELA: Bájate de aquí lagartija. No me gustan los pollos como tú.

-DANIEL: Un pollo que te puede dejar loca.

-PAMELA: Para eso tengo muchos que me pueden dejar más que loca, y tú para llegar a ser como ellos (Mirándolo de arriba abajo) te falta muchísima testosterona y (Mordiéndose el labio) varios centímetros…  ¡Que te bajes te digo!

-ESMERALDA (Risas): No seas tan cruel con el chico…

-DANIEL: Pero…

-PAMELA (Enojada): ¡Seguridad!






-PACO (Acudiendo al llamado de Pamela): ¿Qué pasa? Belleza.

-PAMELA: Baja a este baboso de aquí.

-PACO: Ya escuchaste… ¡Mejor ve a hacer tareas a tu casa! (Risas)

-DANIEL: Ok ya me bajo (Bajando del escenario)

La despampanante Princesa aparece en el escenario y se roba todos los aplausos.





-PRINCESA (Bailando sensualmente contra la pared): ¡Gimme Gimme More! (Tocándose el cuerpo de manera provocativa) ¡Ha llegado su princesa!

-PACO (Al mesero): ¡Dame un trago!


Samantha, la hija del dueño del Night Club mira el baile de Princesa tras bambalinas.





-SAMANTHA (Hablando para sí): ¡Maldita!... se está robando todas las miradas esta recién llegada… ¡Se cree la más perra!  (Altiva)  Pero aun no me conoce a mí, ¡y no ha nacido quien sea más provocativa y deseada que yo!  (Dándole señas al Presentador)

-PRESENTADOR: ¿Me llamó?... Señorita Samantha…

-SAMANTHA: ¡Sí!... ¡Eres un reverendo imbécil!... ¿por qué no me anunciaste al público?... ¡Solo nombraste a Pamela, Esmeralda y a la engreída recién llegada de Princesa! ¿Acaso te piensas que estoy pintada en la pared? (Tomándolo del cuello) ¡Respóndeme! ¡Tarado!

-PRESENTADOR (Intimidado): Discúlpeme… señorita… es que… pensé que no se presentaría…

-SAMANTHA: ¡Eres un idiota! (Dándole una sonora cachetada) ¡Jamás vuelvas a hacerme esto o te haré correr de aquí! ¡Sabes que mi papi hace lo que yo quiera! ¡Espero que mañana me anuncies y de primera!  ¿Ok? ¡Ahora lárgate de mi presencia! (Furiosa) ¡vete!

-PRESENTADOR: Si señora… (Pensando: ¡Maldita niña de mamá!) (Se va)

-SAMANTHA (Entrando a la oficina de su padre): ¡Necesito hablar contigo!, Papá.





-LEONARDO: ¡Te he dicho que no entres así a mi oficina! ¡Cierra la puerta! No quiero escuchar el escándalo de afuera.

-SAMANTHA (Cerrando la puerta): ¡Estoy harta de Princesa!

-LEONARDO: ¿Pero si acaba de llegar? , ¿Ahora que te hizo? ¿Usó tu misma marca de maquillaje? ¡Por favor! Samantha… ¡Siempre es lo mismo!

-SAMANTHA: ¡Todos la aplaudían a ella! ¡Sabes que me gusta ser la reina de la noche! ¿De dónde rayos sacas a las chicas? ¡No quiero que traigas más!

-LEONARDO: Esmeralda y Pamela llevan años trabajando para nosotros sin problemas, pero siempre las que tienen problemas contigo desaparecen, se largan o yo que sé.

-SAMANTHA: Tengo mis secretos así como tú tienes los tuyos,… ¡haces pasar esto como un casino y no es más que un prostíbulo!

-LEONARDO: ¡Un prostíbulo en el que tú no eres mercancía! ¡Recuerda que eres mi hija! ¡no me gusta que bailes!





-PACO (Entrando a la oficina): Señor, ya es hora.

-LEONARDO: Dame media hora, voy hasta mi casa, se me quedó una libreta que necesito, y luego te alcanzo en el lugar acordado.

-PACO: Okey, señor. (Se va)

-SAMANTHA: ¡Lo único que te digo papá que no ha nacido nadie que me opaque!

-LEONARDO: Ten cuidado con lo que haces Samantha, no quiero pensar que tengas que ver con la desaparición de Natasha y Paloma. Ambas altercaron contigo por lo mismo que dices y “de repente” se las ingeniaron para escapar de aquí. ¡Aun con mis amenazas de matar a sus familias!

-SAMANTHA: Se largaron las malagradecidas.

-LEONARDO: Pues más te vale, ¡Porque aquí el que mata soy yo! ¿Entendido? Ahora ven conmigo, te llevaré a casa, ¡Recuerda que tu madre no sabe sobre este Night Club!

-SAMANTHA: No te preocupes, yo voy más tarde.

-LEONARDO: De acuerdo (Se va)



INT. / MANSION ALTAMIRANO / NOCHE





Daniel acaba de llegar a casa y es recibido por la ama de llaves que le tiene un recado de su mamá.





-CHABELA: ¿Cómo está? Joven Daniel…

-DANIEL: Que pasa Chabelita… ¿Llegue muy tarde esta vez?

-CHABELA: Son las diez de la noche… ¿No le parece tarde?

-DANIEL: ¡El borracho de mi padre de seguro no ha llegado! ¿Por qué no le reclaman a él?

-CHABELA: Eso ya es un asunto de ustedes. ¡Tu madre te está esperando en el estudio!

-DANIEL: Voy para allá (Acercándose a Chabela) y tù me esperas más tarde con la puerta de tu habitación abierta ¿Okey?

-CHABELA: Okey jejejeje (Se va)

-DANIEL (Entrando al estudio): ¿Qué quieres mamá?





-MONICA: ¿Qué pasa contigo? Daniel… ¡Donde te mantienes metido! ¡Me tenías muy preocupada!

-DANIEL: ¡Ya basta! Mamá (Furioso) ¡Déjame vivir!

-MONICA: ¿Pero qué te pasa? ¿Por qué te alteras?

-DANIEL: ¿Sabes que es lo que sucede contigo? ¡Que no tienes vida propia! ¡Que vives a la sombra de mi padre mientras él te madrea y hace y deshace contigo!

-MONICA: ¿Qué dices? (Enojándose)

-DANIEL: ¡Que eres una borracha igual que el! ¡Solamente te escondes bajo esos trapos caros! ¡Te disfrazas de  esa “mujer de sociedad”!  ¡No eres más que una perdedora Pusilánime!

-MONICA: ¡CA – (Cachetada) – LLATE! ¡Jamás vuelvas a hablarme de esa manera! ¿Me entendiste?... ¡Jamás!

-DANIEL: ¡Espero que así como me pegas a mí lo hagas con mi padre cuando te  ha dado lo tuyo! ¿Crees que no me doy cuenta? ¡Hasta mi hermano menor lo sabe!





-LUCRECIA (Entrando al estudio): ¿Qué sucede?... ¡Los gritos se escuchan en toda la casa!

-DANIEL: Vaya, ha llegado la hija preferida… (Con resentimiento) a que no sabes que…

-MONICA (Interrumpiendo a Daniel): ¡Cállate Daniel!... ¡Cállate!

-LUCRECIA: ¿Qué está pasando?

-DANIEL: Mejor me encerraré en mi habitación.


INT. / COMISARIA CENTRAL, OFICINA / NOCHE





Comandada por el Comisario Fulgencio García, su hermano Juan acaba de ingresar como agente y ambos trabajan en un caso muy personal.





-FULGENCIO: ¡Entonces esta es tu arma! (Entregándole el arma) y esta es tu placa (Entregándole la placa) ¡Bienvenido!  ¡Agente García!

-JUAN (Abrazando a su hermano): ¡Gracias! Hermano. ¡Espero ayudarte en el caso de nuestra hermana!... ¡Necesitamos encontrar a su asesino!

-FULGENCIO: Perdimos a nuestra hermana (Triste) ¡Perdimos a Paloma!

-JUAN: ¡El desgraciado que la mató pagará! ¡Juro que lo pagará! (Con una mirada llena de venganza)

-FULGENCIO: Aquí tengo el expediente detallado sobre  (Entregándole el expediente) las actividades que hizo Paloma en sus últimos meses de vida trabajando en ese lugar.

-JUAN (Leyendo): Pero en ese lugar, en esa dirección queda un Casino, el ¡Winner Hand!

-FULGENCIO: Tengo la sospecha que funciona algo más en ese lugar, y para eso estas tú.

-JUAN: ¿Me mandarás de encubierto? ¿De infiltrado?

-FULGENCIO: Sí, ese será tu primera labor policial.

-JUAN: ¿Pero por qué trabajaba nuestra hermana en un casino?

-FULGENCIO: Ya te dije que tengo sospechas de que algo más funciona allí.

-JUAN: Porque no haces un allanamiento al lugar y listo.




-FULGENCIO: Porque sin pruebas es ilegal hacerlo. A esta hora debe estar aún abierto el casino, si quieres te hechas una pasada.

-JUAN: Iré en mi coche como civil.



INT. / CASA DE LEONARDO, SALON / NOCHE

Leonardo discute con su esposa.





-LEONARDO: Voy de salida, Cynthia. ¡No me molestes con tus estupideces!

-CYNTHIA: ¿Te parece una estupidez pedirte que pase más tiempo conmigo? ¿Qué vas a hacer a esta hora en el casino?

-LEONARDO: ¡Voy a una junta de negocios! ¿Qué parte no entiendes?

-CYNTHIA: ¿Una junta de negocios a estas horas de la noche? ¡No me creas tan estúpida!

-LEONARDO: Piensa lo que quieras… ¡Solo vine por una libreta!... ya la tengo, así que me voy.

-CYNTHIA: ¿Dónde está mi hija?... ¿En el casino?

-LEONARDO: Si, de seguro ya viene.

-CYNTHIA: Dime la verdad, Leonardo… ¿Me engañas con otra?... ¡Es imposible que vayas a una junta en ese maldito Casino a estas horas!

-LEONARDO: Definitivamente no sabes nada. ¡La mayoría de casinos se administran de noche! ¡Se supone que de noche hay más jugadores!

-CYNTHIA: Falta a ver que de verdad sea un casino. Nunca me dejas ir a verlo.

-LEONARDO: ¡Ya te dije que pensaras lo que te diera la maldita gana!

-CYNTHIA: ¡Lárgate con tus amantes! Yo me quedo aquí en casa como siempre.

-LEONARDO (Enojado): ¿Sabes qué?... ¡Me reprochas porque no te toco! ¿Por qué no te miras en un espejo?... ¡No ves que estas vieja! ¡Ya no me interesas! Así que piensa lo que sea… ¡Me largo! (Se va)

-CYNTHIA (Pensando): ¡Perro Maldito!... ¡Destruiré a cualquiera que se interponga entre nos dos!... ¡a cualquiera!


INT. / BODEGA SECRETA / NOCHE

Leonardo acaba de llegar a la bodega que queda debajo del Night Club, cerca del sótano, es decir: El casino tiene dos plantas abajo que son el Night Club y esta bodega. Paco está en el lugar martirizando a Alberto que se encuentra sentado con sus manos atadas junto a un bote de agua.





-LEONARDO: Vaya vaya… ¿Te han atendido bien? ¡Pedazo de rata!

-ALBERTO (Muy golpeado): ¡Suéltame! Leonardo… Te lo suplico.

-LEONARDO: Págame y luego ordenaré a Paco que te suelte.

-ALBERTO: ¡No tengo como pagarte!

-LEONARDO (Leyendo su libreta): ¿Y tienes el descaro de seguir viniendo a mi casino debiéndome un millón de dólares? ¡Tú asquerosa empresa está en la quiebra así que no me interesa como pago! ¡Quiero dinero! (Tirándole la libreta en la cara)

-ALBERTO: No tengo como pagarte ¡Entiende que aposté aquella noche no en mis cinco sentidos! ¡Estaba Ebrio!

LEONARDO (Hundiendo la cabeza de Alberto dentro del bote de agua): ¿Acaso crees que me importan tus adicciones?... ¡Lo único que me interesa es que me pagues lo que debes! (Sacando a Alberto)

-ALBERTO (Tratando de respirar): ah… ah… ah… ah… que… que…  ¿Qué quiere que haga? (Agitado)

-LEONARDO: Paco, dile a Alberto qué pasa con los que se atreven a no pagarme.

-PACO: ¡Se van derechito para el infierno!

-ALBERTO (Ocurriéndosele una idea): Tienes un Nigth Club ¿No?

-LEONARDO: Como te enteraste…

-ALBERTO: Cuando me trajeron hasta aquí lo vi. En fin… ¿no necesitarías a una muchacha más?

-LEONARDO: ¿Tienes a una muchacha?

-ALBERTO (Desesperado): ¡Sí! A mi hija ¡Te la doy como pago! ¡Con mi hija te pago todo lo que te debo!

-LEONARDO: No conozco a tu hija,… ¡Qué tal que sea un repugnante adefesio! (Apuntándole con su arma) ¡No estoy para juegos!, Alberto…

-ALBERTO: Es hermosísima… ¡Sería la gran atracción!

-LEONARDO: Como se llama tu hija…

-ALBERTO: Lucrecia.

-LEONARDO: Digamos que te creo. ¡Entonces a partir de hoy la tal Lucrecia es de mi propiedad!...

-ALBERTO: Con que excusa la traerás.

-LEONARDO: Ya se lo que voy a hacer. Mandaré a traerla ahora mismo. ¡Y si se te ocurre acusarme con la policía te mataré! ¡Sabes que tengo ojos o idos por todas partes! ¡Suelta a Alberto! Paco.

Leonardo le da indicaciones a Paco.

Minutos más tarde…

En el Night Club…


Samantha ve que Paco sube las escaleras hacia el casino con Alberto.





-SAMANTHA: ¿A dónde vas?... ¿y quién es este señor?

-PACO: Deberías irte a tu casa ya Samantha (Agarrando a Alberto) ya está muy tarde y el Night Club ya cerró.  (Sale del casino con Alberto)

-PACO (Subiendo a un coche con Alberto): ¡Ya sabes lo que vamos a hacer! (Apuntándole con un arma) ¡Me envías un mensaje de texto cuando todo esté listo!


Mientras tanto…


-SAMANTHA (Entrando a los camerinos): No hay nadie aquí, no hay clientes afuera… ¿Todos se han ido?

-PRINCESA (Apareciendo de sorpresa): ¡Yo todavía estoy aquí! Querida…





-SAMANTHA: Pues que bueno (Altiva) ¡Justamente contigo quería hablar!

-PRINCESA: ¿Ah sí? ¿Y se puede saber sobre qué?

-SAMANTHA: ¡Sobre esto! (Cacheteando a Princesa) ¿Entendiste el mensaje? ¡Golfa!

-PRINCESA (Sobándose la frente): ¿Qué te pasa? Samantha,… apenas si nos conocemos.

-SAMANTHA: En eso tienes razón, ¡tú no sabes quién soy yo! ¡No me gusta que alguien brille más que yo en el escenario!

-PRINCESA: Pero ni siquiera te presentaste. ¿Qué culpa tengo yo? Ah claro, ya entiendo… envidias mi belleza… ¡Una belleza que tú no tienes! (Cacheteando a Samantha) ¡Me la debías!

-SAMANTHA (Furiosa): ¡Asquerosa maldita!... ¿Te crees la más perra?  ¿Eh? ¿La más golfa? ¿La reina del Night Club? ¿A la que todos miran?... déjame decirte que estas equivocada… ¡En este lugar solo hay espacio para una perra! (Sacando y apuntando con un arma a Princesa) ¡Y esa perra soy yo!

-PRINCESA (Nerviosa): ¡Baja esa arma! ¡Baja eso! ¡No me interesa ser la más destacada de este lugar! Bien sabes que nos obligan a hacer lo que hacemos. ¡Que este lugar es peor de lo que parece!

-SAMANTHA: No tengo idea de lo que estás hablando. Lo único que puedo decirte es que todas las que se atrevieron a ser más que yo ahora están tres metros bajo tierra, ¿Entiendes?... ¡tres metros bajo tierra!,… Primero fue Natasha, luego Paloma, y ahora… ¡Ahora sigues tú!

-PRINCESA (Forcejeando con Samantha): ¡Eso Nunca!

-SAMANTHA (Gritando): ¡Suelta el arma! ¡Desgraciadaaaaaaaa! ¡Suéltala!



INT. / MANSION ALTAMIRANO / NOCHE




Alguien toca el timbre desesperadamente





-CHABELA: ¡Ya va! ¡Caray! (Abriendo la puerta) ah es usted señor Alberto. ¿Qué le pasó? ¿Lo asaltaron?

-ALBERTO (Entrando desesperado): ¿¡Dónde está Lucrecia!?

-CHABELA: Esta en…

-ALBERTO (Samaqueando a Chabela): ¡Habla rápido! ¡Donde está Lucrecia!

-CHABELA: Pos, en su habitación… donde más.

-ALBERTO (Subiendo las escaleras): ¡Lucrecia!

-CHABELA (Hablando para sí): Que mosco le picó a este. (Se va para la cocina)


-LUCRECIA (Saliendo de su cuarto): ¿Qué pasa papá?... ¿Me llamaste? (Mirando el aspecto de Alberto) ¿Qué te pasó? ¿Por qué estás así de golpeado?





-ALBERTO: ¡Tienes que venir conmigo!

-LUCRECIA: ¿A dónde vamos?

-ALBERTO (Alterado): por favor ¡Acompáñame!

-LUCRECIA: Pero por lo menos dime a dónde vamos.

-ALBERTO: En el camino te explico.

-MONICA (Saliendo de su cuarto): ¿Qué está sucediendo? ¿A dónde van?

-ALBERTO: ¡Lucrecia! Espérame en el coche…

-LUCRECIA: Pero…

-ALBERTO: ¡Que me esperes en el coche! ¡Baja por favor!

LUCRECIA: De acuerdo papá, pero no entiendo nada. (Bajando al coche)

-MONICA: ¿A dónde llevas a mi hija?

-ALBERTO: No tengo porque decirte lo que hago o dejo de hacer. ¡Por qué no sigues en tu cuarto bebiendo whisky!

-MONICA: Tú también lo haces.





-ALBERTO: Tengo prisa, Mónica… ¡Déjame en paz!

-MONICA: ¡A dónde vas con mi hija! ¡A donde!

-ALBERTO: ¡Déjame tranquilo! (Alterado) Mónica.

-MONICA: Tengo un mal presentimiento. ¿A dónde la llevas? ¡Dímelo!.... ¡Que me lo digas!

-ALBERTO: Ah… te me estás alebrestando… ¿Quieres que te recuerde quién eres? (Agarrándola del cabello) ¡Aquí yo soy el marido y tú la mujer! (Entrando con Mónica a su habitación) ¡No lo olvides!

-MONICA (Asustada): ¿Qué vas a hacerme?

-ALBERTO: Lo que siempre hago (Golpeando a Mónica) ¡Esto es para que aprendas a que no debes meterte en mis cosas! (Cacheteando a Mónica) ¡Metiche! ¡Aquí se hace lo que yo digo y cuando yo lo digo!

-MONICA (Llorando): ¡Suéltame por favor! ¡Ya no más!





-JUNIOR (Viendo lo que pasa por una rendija en la puerta): Están Peleándose otra vez.


-ALBERTO: Y ni una palabra de esto a nadie Mónica… ¿Me entendiste? (Saliendo de la habitación)

-JUNIOR (Se esconde en su habitación al ver que salía Alberto): Porque siempre le pega a mi mamá (llorando) ¡porque! Y siempre le digo a mi hermana y no me cree.

Junior intenta acudir a su hermano Daniel tocado a su puerta pero Daniel no lo escucha pues está en la cama con los audífonos puestos y a todo volumen.

Alberto se sube al coche y arranca despavoridamente.

-LUCRECIA (Asustada): ¿No crees que vas muy rápido? Papá, y este ni siquiera es tu coche.





-ALBERTO (Al volante): ¡Cállate! ¡Lucrecia!

-LUCRECIA: Papá ¡Me estas poniendo nerviosa! … ¿A dónde vamos?

-ALBERTO: ¡Que te calles te digo!

-LUCRECIA: ¡Papá! ¡Vas muy rápido! ¡Detente!

-ALBERTO: ¡No!

-LUCRECIA (Tomando el volante): ¡Detente! ¡Estás muy alterado!

-ALBERTO: ¡Suelta el volante! ¡Que lo sueltes te estoy diciendo! (Esquivando varios coches)

-LUCRECIA (Viendo una gran luz): ¡Cuidado con ese camión! ¡Cuidado!

-ALBERTO: ¡Aaaaaahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh!


INT. / NIGHT CLUB / NOCHE

Princesa y Samantha siguen forcejeando, no hay nadie más en el establecimiento ni arriba en el casino.





-SAMANTHA: ¡Suelta el arma! ¡Voy a matarte!

-PRINCESA: ¡No lo voy a permitir!  Debes entender que trabajo porque nos tienen obligadas tanto a mí como a Esmeralda y Pamela.  ¡Nos tienen amenazadas con matar a nuestras familias si no nos prostituimos aquí! ¡Y Sabes que tu padre no bromea!  ¡Voy a gritar! ¡Auxiliooooooooooo!

-SAMANTHA (Empujando a Princesa contra la pared): ¡Cállate!

-PRINCESA (Golpeándose la cabeza en la pared): ahhhhh ¡Ayyy!

-SAMANTHA (Quitándole el arma a Princesa): ¡Ahora! ¡Despídete de este mundo!  Tranquila, seguirás bailando…

-PRINCESA (Llorando): ¡No me mates! Te lo ruego…

-SAMANTHA: ¡Ve a bailar al infierno! (Descargando tres disparos sobre Princesa)



EXT. / CALLE / NOCHE




Juan va en su coche rumbo al casino para obtener información de inteligencia.




-JUAN (Al volante): Las calles están desoladas. Así estaría mi hermana, desolada cuando la asesinaron cruelmente… ¡Juré venganza! ¡Hare pagar a tu asesino! Paloma…


Muy cerca de allí…


Alberto y Lucrecia están fuera del coche que se ha chocado con un árbol al esquivar el camión.





-LUCRECIA: ¿Viste lo que ocasionaste? Papá…

-ALBERTO (Hablando con Lucrecia mientras escribe un mensaje de texto): Sea lo que sea que pase hija, quiero decirte que no encontré otra salida.

-LUCRECIA: ¿Qué dices? … Y… ¿A quién le escribes?

-ALBERTO: Oh por Dios el auto va a Explotar… ¡Al suelo!

-LUCRECIA (Tirándose al suelo): ahhhhh !!!!! (Mientras partes del coche vuelan a causa de la explosión)

-JUAN: ¡Ahora una explosión! (Acelerando)





Muy cerca de allí…





-PACO (Leyendo el mensaje de texto): umm (Respondiendo el mensaje) okey (Llamando por teléfono a Leonardo): ¿Jefe?

-LEONARDO: ¿Ya está todo listo?





-PACO: Estoy aquí en mi coche,  a unos pasos de ellos. Quedamos de simular un secuestro como excusa, así fue que usted me lo indicó.

-LEONARDO: Entonces tráeme de inmediato a la muchacha esa. ¡Ella es mía ahora!

-PACO: ¿Y qué hago con Alberto? Se supone que el prácticamente está vendiendo a su hija. La da como pago a sus deudas.

-LEONARDO: ¡No podemos dejar cabos sueltos!  ¡Él puede hablar sobre la verdad del Night Club! ¡Mátalo! ¿Me escuchas?... ¡Mátalo! (Risa malvada)

-PACO: Okey señor (Colgando el teléfono) bueno, vamos para donde el viejo.

-LUCRECIA: ¡Mira Papá!... ¡Viene un coche!... ¡Pidamos ayuda!

-ALBERTO (Sabe que se trata de Paco): ¡Buena idea!

-LUCRECIA: ¡Holaaaaaaaaaa! ¡Por favor! ¡Pareeeeeeeen!

-PACO (Bajando del auto): ¡Sube al auto! Muñequita…





-LUCRECIA: ¿Qué?

-PACO (Apuntando a Lucrecia): ¡Que te subas! (Agarrando a Lucrecia)

-LUCRECIA: Auxiliooooooooooooo

-JUAN (Al volante- llegando al lugar donde está Lucrecia): ¿Escuché una llamada de auxilio?

-PACO (Empujando a Lucrecia dentro del auto): ¡Súbete! ¡Vamos a dar un paseíto!

-ALBERTO: ¡Suelta a mi hija! (Diciendo esto como parte del teatro del secuestro)

-PACO: ¡Silencio! ¡Viejo estúpido! (Apuntando a Alberto)

-ALBERTO (Sorprendido): Pero…  No quedamos que…

-PACO (Descargando un disparo sobre Alberto): ¡Ahí está la factura de pago! (Risa Malvada)

-LUCRECIA (Gritando): ¡Papaaaaaaaaa! (Mientras ve a su padre caer al suelo)

-PACO (Pisando el acelerador): ¡Ahora vámonos!

-LUCRECIA: ¡Auxiliooooooooooo!

-JUAN (Al volante – Mirando la silueta de una mujer gritando dentro de un auto): ¡Un secuestro! (Girando para perseguir al coche de Paco)





-PACO (Mirando desde el retrovisor que un coche lo persigue): ¡No quiero sapos! (Frenando en seco)

-JUAN (Chocándose con la parte trasera del auto de Paco): ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhh ¡Bestia!

-LUCRECIA (Mirando a Juan desde la ventana): ¡Auxilioooooooo! ¡Ayúdeme por favor!





-JUAN (Impactado): ¿Paloma?.... ¡Paloma!

-PACO (Dándole un fuerte golpe a Lucrecia): ¡Silenciooooooooo!

Lucrecia cae sin conocimiento en el asiento del coche.

-JUAN (Tratando de arrancar el coche): ¡Arranca! ¡Arranca! ¡Maldita sea! ¡Estoy seguro que era Paloma! ¡No puedo estar enloqueciéndome! ¡Era Paloma! (Saliendo del coche y siguiendo a pie) Seguiré las huellas del coche.





INT. / NIGHT CLUB / NOCHE


Paco entra cargando a Lucrecia que aún sigue inconsciente y se encuentra con Samantha en una extraña actitud.





-PACO: ¿Qué haces aquí? ¡Te dije que te fueras para tu casa! ¿Por qué tienes sangre en las manos?

-SAMANTHA (Nerviosa): eh… eh…

-PACO: ¿Qué tienes escondido en ese costal?

-SAMANTHA: Es Princesa, ¡Acabe de matarla! ¿Oye?... ¿Esa que tienes ahí es Paloma?

-PACO: ¿Paloma?... ah…. No me cambies el tema… ¿Asesinaste a Princesa?... ¡Eres tú la que ha estado matando a las chicas!... se lo diré a tu padre.

-SAMANTHA (Acercándose a Paco): ¿Qué quieres por tu silencio? (Tocándole sus partes)

-PACO: Umm te entiendo a la perfección. ¡Espera le llevo esta chica a tu padre y luego vengo por mi paga!

-SAMANTHA: ¿Cómo así?... ¿Esta mujer es una nueva bailarina? ¡Pues que no se le ocurra ser más que yo porque le pasara lo mismo que a Princesa!

-PACO: ¿Por qué dices que es Paloma?

-SAMANTHA: Porque se parecen mucho. Pero no es. ¡Yo misma la maté!


Minutos después…


INT. / BODEGA / NOCHE


Está a punto de llegar la media noche, Desde la bodega en la planta baja del Nigth Club Leonardo contempla la belleza de Lucrecia que se encuentra inconsciente sentada en un gran sofá.





-LEONARDO: Si, te pareces a Paloma, pero tú eres más bella.

-LUCRECIA (Despertando): Que… que… ¿Qué hago aquí?

-LEONARDO (Desnudándose): Hola belleza… no perdamos más tiempo.

-LUCRECIA: ¿Donde estoy?

-LEONARDO: Como vas a ser mia no tendré secretos contigo. Esto que ves es un prostíbulo y expendio de drogas, los clientes no lo saben, solo saben que hay un Night Club oculto, pero aquí llegan muchos clientes y narcos pudientes para acostarse con las chicas, y obvio ellos me van a echar al agua porque tenemos intereses en común. Así venga la policía jamas descubrirán la verdadera función de este casino y Night Club porque las tengo amenazadas y saben que cumplo lo que digo.

-LUCRECIA: ¡Oiga! ¡Cúbrase! ¡Cúbrase!

-LEONARDO: Creo que hay algo que no has entendido. ¡Tú ahora eres mía! ¡Eres mi bandida!


Mientras tanto… a las afueras del Casino…





-JUAN (Agitado de caminar): ¡Allí está el coche! Y justo en este casino… ¡Que coincidencia! ¡Tengo que averiguar lo que pasa! (Entrando al casino) La puerta está abierta (Sacando su arma) tengo que ser cuidadoso,… hay rastro de forcejeo por aquí. (Entrando por otra puerta) ¡Una escalera! (Escuchando gemidos) ¿Qué está sucediendo aquí? ¡Es un Bar! (a punto de llegar a las instalaciones del Night Club)

En el baño del Night Club…

Paco y Samantha destilan pasión, ambos desnudos se dan duro contra la pared.





-SAMANTHA: Ah ahhhhhhh ¡No sabía que eras así de insaciable!

-PACO (Tapando la boca de Samantha): ¡Silencio! ¡Escuché ruidos arriba!

-SAMANTHA: ¡Entonces dejaste la puerta del casino abierta!



Por otro lado…


-LEONARDO (Besando a la fuerza  a Lucrecia): ¡Vas a ser mía! ¡Mamacita!

-LUCRECIA (Llorando): ¡Suélteme! ¡Déjeme en paz!





-LEONARDO: ¡Estas muy salvaje! ¿Quieres que te dome? ¡Estúpida! (Arrancándole la blusa)

-LUCRECIA: ¡NOOOOOOOOOOOOO!

-LEONARDO (Cacheteando a Lucrecia): ¡Vas a ser mía!

-LUCRECIA (Pateando a Leonardo en sus partes): ¡Que me sueltes!  (Corriendo)

-LEONARDO: ¡Ven acá! (Colocándose la camisa)

-LUCRECIA (Subiendo las escaleras): ¡Auxilio! (Llegando a las instalaciones del Night Club) ¡Auxiliooooooooo! (Tropezándose con el costal)

-JUAN (Entrando): ¿Qué sucede?... ¿Paloma?

-LUCRECIA: Ayúdeme… ayúdeme por favor…






-PACO (Desde el baño): ¿Qué está pasando? (Vistiéndose)

-SAMANTHA (Vistiéndose): Creo que es la nueva… ¿Escuchaste que él dijo “Paloma”?

-LUCRECIA: ¡Ayúdeme señor! ¡Me quieren violar!

-JUAN (Perturbado): Pero… Pero…

-LUCRECIA (Viendo que viene Leonardo): ¡Me voy de aquí! (Se va)

-LEONARDO (Viendo a Juan): ¿Quién es usted?... ¡Bueno no me interesa! ¡Tengo que ir tras ella! (Se va tras Lucrecia)

-SAMANTHA (Saliendo del baño): ¿Quién es usted?

-JUAN: ¡Soy la policía! ¡Señorita! ¡Explíqueme que está pasando aquí!

-SAMANTHA: Le escuche nombrar a “Paloma”

-JUAN: Si, por una muchacha que acabó de salir de aquí… y que estaba junto a ese costal, se parece mucho a mi difunta hermana.

-SAMANTHA (Asustada): ¿Tú eres hermano de Paloma?...

-JUAN: Si, ella trabajó en el casino de arriba. ¿La conociste?

-SAMANTHA (Ocurriéndosele una idea): si… y ¿notaste que estaba escondida en el baño?

-PACO (En el baño/ pensando): Que se le habrá ocurrido a esta…

-JUAN: ¿Estabas escondida?

-SAMANTHA (“Llorando”): Si… porque esa chica acabó de matar a mi compañera.

-JUAN: ¿Qué?

-SAMANTHA (Destapando el costal): si… mire… y yo me escondí para que no me matara a mí.

-JUAN: ¿Y por qué lo hizo?





-SAMANTHA: Porque mi compañera descubrió que ella mató a tu hermana para aprovecharse de su parecido y suplantarla… ¡Ella no es más que una bandida! ¡La mató para suplantarla y ganar dinero acosta de su identidad! ¡Ella la mató!

-JUAN (Impactado): ¡¡ ¡¡ ¡¿Qué?! ! !!


CONTINUARA…

Samanta Fox ya tiene lo menos 50 años, pero en su época estaba mucho más buena que la Lopilato...

jaja si pero Samanta Fox es muy mala.

Bueno, pobre Lucrecia, su padre la vende para saldar una deuda y la pone a trabajar a un prostibulo... Se ve que tendrá algo con Juan... Pero a él le están envenenando la mente... Esta entretenida tu novela, es ágil y fácil de leer.

Una cosa: en Miami, los casinos están prohibidos por la ley. O sea, el casino sería clandestino.

Saludos,

Renzo

renzoch escribió:Bueno, pobre Lucrecia, su padre la vende para saldar una deuda y la pone a trabajar a un prostibulo... Se ve que tendrá algo con Juan... Pero a él le están envenenando la mente... Esta entretenida tu novela, es ágil y fácil de leer.

Una cosa: en Miami, los casinos están prohibidos por la ley. O sea, el casino sería clandestino.

Saludos,

Renzo

Asi es, y aparte de ser clandestino es una fachada