Capitulo 7: La "enfermedad" de Don Cesar

Capitulo 7 - La "enfermedad" de Don Cesar



En el hospital.
En el salon de Don Cesar.

MARCOS: ¡Papá!! (se acerca a su camilla y le coje la mano; se le caen unas lagrimas)

Cesar abre los ojos poco a poco.



CESAR: (ve a su hijo) ¿Tú?! (se queja) ¿Que haces aquí? (a Rafael) ¿Para que lo llamaste?
RAFAEL: Me preocupé por usted, Don Cesar.
MARCOS: Papá, no me hables así, que me duele mucho lo que te paso.
CESAR: ¿Que vas a saber tú de dolor? No me vengas ahora con que te importó que no nací ayer. Te fuiste de la casa porque no me quierías.
MARCOS: No digas eso, papá! Me fui de la casa porque no aguantaba más tu forma de tratar a las personas. Y si se trata de amor, tú tampoco sabes el significado de esta palabra. Acuerdate que fuiste el primero en dejar morir a mi mamá...
CESAR: ¡No hables de tu madre!! Con tu madre fue otra historia. (se queja) No estoy aún recuperado y mira cómo me pones!
MARCOS: (suspira) ¡Perdoname, papá!

Cesar lo mira y luego voltea la cara y mira al lado opuesto.

MARCOS: (a Rafael) Rafael, quiero que estes vijilando a mi papa todo el día! No quiero que le pase nada malo.
RAFAEL: Ok. No se preocupe doctor! Así haré!
CESAR: (sin voltear) Los estoy escuchando. ¿Que estan planeando? ¿Por qué no te vas, hijo? Quiero dormir. Además Rafael se queda conmigo.
MARCOS: No, papá... esta vez no me voy a ir de tu lado.
CESAR: ¡Hazme caso de una vez! (suspira) Si me siento mal prometo llamarte!
MARCOS: (suspira) Ok papá! (a Rafael) ¡Haz lo que te dije!
RAFAEL: (a Marcos) ¡Claro!

Marcos se va.

CESAR: Si pasas del lado de mi hijo, te despido!
RAFAEL: ¡No se preocupe, Don Cesar!
CESAR: ¡Yá! Ahora vez como te las arreglas con ese medicucho pa' que se calle!
RAFAEL: Claro, mi Don. Pero ¿que le dirán a su hijo cuando vendra a verlo?
CESAR: Simplemente le dirán que me sentí bien y me dieron de alta. ¿Que parte no entiendes? ¡Y ve hablar con ese medico de una vez!
RAFAEL: Ok, mi Don.

Rafael sale.

CESAR: Al enemigo... (quitandose los hilos que lo mantenían conectado a los aparatos) hay que tenerlo cerca!

***

Al pasillo del hospital.
Rafael va hacia el despacho del doctor. Se encuentra con él al pasillo.

RAFAEL: ¡Venga para aca, doctor! (lo mete al consultorio)

Al consultorio.

EMILIANO: ¿Que paso?
RAFAEL: Necesito que me haga un favor. (con las manos en los bolsillos)
EMILIANO: ¿Que favor?
RAFAEL: Tiene que ver con mi jefe. Lo trajeron en la mañana con ese golpe en la cabeza.
EMILIANO: ¡Sí, claro! ¿Que favor?
RAFAEL: (saca unos dólares) ¡Mire! Todo esto puede ser suyo, doctorsito! Pero voy a necesitar su autorización para sacar a mi jefe del hospital.
EMILIANO: Hmm... (sonríe) ps fíjese que no me vendo! Y segundo: el paciente no sale hasta que se encuentre totalmente recuperado.
RAFAEL: Mire, doctorsito... (tocando su bolsillo dónde tiene el arma) ya anda colmando mi paciencia! Y mi paciencia tiene un límite!
EMILIANO: ¿Me está amenazando?
RAFAEL: ¡Tómalo como quieras! Pero... o me firma la autorización o lo saco a la fuerza!
EMILIANO: ¡Eso lo veremos! (se acerca a su escritorio y hace llamar a la enfermera)
ESTELA: (entra) ¿Que paso, doctor?
EMILIANO: ¡Llama la seguridad y cuiden que Don Cesar no salga!
ESTELA: Esta bien, doctor.

Estela se va.

RAFAEL: (lo mira con odio) Muy bien, doctorsito... ¡Ya lo veremos!
Rafael se va.


***

Por los pasillos, Don Cesar anda caminando y esperando a Rafael.

CESAR: ¿Que pasó? ¿Ya lo convensiste?
RAFAEL: No... pero vamos que puso que los guardías vijiláran su salón! ¡Vamos!
Rafael logra sacar a Don Cesar del hospital y llevarlo a la casa.

***

Salón de Don Cesar.
Entra Estela al salón de Don Cesar.

EMILIANO: ¡Mierda!
ESTELA: Creo que fue mejor así, doctor. Esos hombres... me da la impresión que son peligrosos.
EMILIANO: Cuando ese gorila vinó a mi despacho se tocaba mucho el bolsillo y dejaba ver un arma.
ESTELA: Con esos hay mejor no oponerse, doctor! ¡Cuídese!
EMILIANO: ¡Tu tambien, Estela!

Por difúsor llaman al doctor.
Los dos se van.

Capitulo 8 – El desmallo de Irma…

En la mansión Diaz-Castro.
Irma está desmallada en la cocina. Viene Donato y la ve.

DONATO: ¡Ah caray! (la lleva al sofa al salón y va a buscar a Doña Victoria)

Al salón.
Baja Doña Victoria.

DOÑA VICTORIA: ¿Que le pasó a Irma, Donato?
DONATO: No lo se, señora... la vi desmayada en la cocina. Voy por el alcohol!

Donato va por el alcohol.

DOÑA VICTORIA: ¡Sí, claro, yo quedo con ella!

Viene Rodolfo.

RODOLFO: ¡Hola, mamá! (sube las escaleras haciendo que no ve a Irma)
DOÑA VICTORIA: Irma se desmalló, hijo... Donato fue por el alcohol!

Regresa Donato.

DONATO: Aquí está el alcohol, señora! (echando un poco de alcohol, le pasa por la naríz a Irma)
IRMA: (despierta poco a poco) ¿Que me paso?

Rodolfo sube las escaleras.

DOÑA VICTORIA: Te desmallaste en la cocina. Donato te encontró y te trajó al salón. ¿Cómo te sientes?
IRMA: Un poco mareada, señora...
DOÑA VICTORIA: Deberías hacerte un chequeo... no me gustaría saber que estás enferma. Voy a hablar con Emiliano para que te haga las pruebas cuanto antes.
IRMA: (suspira) Está bien, señora.

Viene Marcos.

MARCOS: ¡Buenas tardes, señora!
DOÑA VICTORIA: ¿Que tal, hijito?
MARCOS: (suspira) Allí le sobrevivo... mi papá está internado en el hospital... se sintió mal. (ve a Irma) ¡Irma! ¿Estás bien?
IRMA: ¡Sí, no te preocupes! Solamente fue un desmallo.
MARCOS: Esta bien... pero te acompaño hacerte un chequeo.
IRMA: Esta bien...

Doña Victoria marca al doctor para que venga a revisar a Irma.


Continuará...