Capitulo 14 "Aliados y Enemigos"

Marcia seguía boquiabierta por la reacción de su hijo, pero reacciono y le soltó tremenda bofetada a su hijo, que solo hizo que este se le pusiera más al brinco.



-Dylan: Puedes darme mil golpes, sacarme sangre si quieres, la verdad no me importa, ya no soy un niño y Ana Lucia se queda.

-Marcia: Esta chamaca no se queda aquí, nadie con su apellido es bienvenido, o se va por las buenas o yo misma la saco.

-Dylan: Atrévete y te quedas sin hijo.

-Marcia: No lo puedo creer, tanto te importa esta estupidita, yo soy tu madre desde que naciste, esta pobre llevas conociéndola una semana o días quizá, y te pones así por ella…

-Ana Lucia: Ya por favor Dylan, Dylan yo me tengo que ir, esto ya no me gusta, te lo agradezco mucho pero me entenderás, me siento demasiado incomoda…

-Marcia: ¡Pues cómo no! Si sabes que en esta casa no eres bienvenida, y por tu bien, no te vuelvas a aparecer.

-Ana Lucia: Discúlpeme, compermiso.

-Dylan: Ana Ana no amor (queriéndola detener)

-Marcia: Hey, Hey (lo detuvo) tu y yo vamos a hablar muy seriamente.

-Dylan: Adelante, hay tantas cosas que tengo que decirte… mama.

Patricia se quedó sin palabras al escuchar a Leopoldo.



-Patricia: ¿Y lo dices tan tranquilo? Pero como puedes… seguro que tú lo planeaste con ella.

-Leopoldo: No no no, yo no tengo nada que ver… ella lo hizo, como tú dices, se enteró de lo que quería tener con Susana y se enfureció tanto que le hizo esto.

-Patricia: Pues qué esperas, tienes que denunciarla, tienes que decir todo, esa mujer no puede estar tan libre y burlándose de todos, cualquiera puede ser su víctima.

-Leopoldo: Tranquila… no puedo hacer nada, mucho menos hablar.

-Patricia: ¿Qué? ¿De qué hablas? Por dios… mi amiga se está muriendo, y tú no quieres acusar a la asesina.

-Leopoldo: Es que no entiendes, me tiene amenazado, ella me dijo que si yo abro la boca ella dirá que fui su cómplice… la muy sínica me tiene amarrado, además por mí no me importaría, la acusaría, no me importa acabar en la cárcel, pero no tenemos pruebas…

-Patricia: ¿No basta con tu declaración? Yo puedo decir que también la vi salir del lugar y es verdad, yo la vi, además deben de haber cámaras en el edificio.

-Leopoldo: Primero mi declaración no valdría nada, es la declaración de un cómplice con lo que declararía Marcia, además que la hayas visto no significa mucho, pudo haber estado ahí por cualquier otra cosa que se invente, y el edificio solo cuenta con cámaras en el lobby, en las escaleras, en las recamaras, pasillos no y mucho menos en la azotea.

-Patricia: No puede ser, tanta suerte de esa zorra, no es posible.

-Leopoldo: Yo la quiero ver podrida igual que tú, pero hay que ser inteligentes, si la acusamos y no encuentran pruebas, la dejaran libre y puede hacernos algo y mucho peor hacerle alguna otra cosa a Susana o incluso a Dieguito.

-Patricia: No, no, no eso ni lo digas…

-Leopoldo: Lo mejor es encasillarla, por lo pronto, le hice creer que estoy con ella, seré su aliado y su enemigo, hare lo que sea porque pague lo que ha hecho.

Leopoldo empuño su mano.



-Marcia: Te voy a decir solo una vez lo siguiente Dylan, yo no estoy en tu contra, me da igual si tienes una enamorada, pero te repito no quiero que sea esa estúpida chamaca.

-Dylan: Pues lo siento mama, porque ella es, y si no te gusta, date la vuelta cada vez que esté aquí.

-Marcia: No me hables así, no me retes, no te conviene, no les conviene los dos, no me conoces, y aunque sea tu madre, soy capaz de lo que sea para separarlos.

-Dylan. ¿Por qué la odias? Ella no te hizo nada…

-Marcia: Ella no, pero su madre si, su madre es una idiota, que no se da cuenta de que ustedes dos no pueden andar.

-Dylan: ¿Por qué? ¿Por qué a ti no te gusta la idea? Mira mama yo siempre he hecho lo que tú me pides, lo que me dices, pero basta, no hare ninguna sola cosa más que tú me digas y a mí no me parezca, deja de meterte en mi vida…

-Marcia: Lo seguiré haciendo, porque antes de que fuera tu novia, soy tu madre… así que no pretendas que te dejare tranquilo mientras andes con ella y eso tenlo por seguro, no voy a permitir que se salga con la suya.

-Dylan: Pues no puedes hacer nada, nos queremos y nos quedaremos juntos.

-Marcia: Pues entonces atente a las consecuencias, lo vas a lamentar, ¡te lo juro!

Marcia subió a su habitación y al entrar empezó a romper las cosas que encontraba en su camino, Dylan abajo dejo caerse en el sofá marrón y se llevó las manos a la cabeza, salió de su casa rápidamente para alcanzar a Ana Lucia.



El doctor salió e interrumpió la plática de Leopoldo y Patricia.

-Doctor: Ustedes son los familiares de la Sra. Willson.

-Patricia: Así es.

-Doctor: Necesitamos que alguien firme la autorización de la operación, si no se hace de inmediato, en caso de que se recupere podría perder las dos piernas, así que es necesario hacer la operación.

-Leopoldo: Claro que sí, yo puedo firmar, soy su novio, próximamente si Dios lo permite su esposo.

-Doctor: Bueno pues entonces venga por aquí.

Marcelo regreso a donde estaba Patricia con Dieguito mucho más tranquilo.



-Marcelo: ¿Qué tal? Ya estamos de vuelta.

-Patricia: ¿Cómo sigue Diego?

-Marcelo: Mejor, logre que se olvidara un poco de lo que estaba pasando su mama, y pues está un poco más tranquilo, iré a la oficina tengo que checar unos últimos asuntos, deje encargado a Oliver pero la verdad es que estoy más tranquilo si lo arreglo yo solo.

-Patricia: Claro, perdona por no apoyarte hoy en la oficina pero pues…

-Marcelo: No no, ni lo digas, no hace falta que te disculpes, entiendo muy bien la situación, por favor mantenme al tanto de todo lo que pase, si se necesita trasladar a algún hospital mejor, no duden en hacerlo, la compañía paga todo.

-Patricia: Muchas gracias Marcelo… tienes un gran corazón.

-Marcelo: No, Susana es una mujer ejemplar, no se merece esto y a pesar de lo que paso, el cariño que le tengo es grandísimo y eso no se va a acabar, dejare a Diego con la vecina, ya está informada, lo mejor es que se quede ahí algunos días, ya hable con ella y le dejare algunos billetes, para que se encargue de él.

-Patricia: Claro, de todas formas yo me encargare de el mañana.

-Marcelo: Entonces, vuelvo más tarde

Se acerca a ella y se despide de beso.



Dylan por más que pudo corrió y no encontraba a Ana Lucia hasta que la miro en un parque sentada justo en el medio donde yacía una escultura de una mujer sirena.

-Dylan: Amor ¿Qué haces aquí?

-Ana Lucia: Dylan, me siento muy mal.

-Dylan: Pero ¿qué pasa? ¿Por qué lloras?

-Ana Lucia: Como quieres que no llore después de lo que acaba de pasar, realmente fue horrible, me hizo sentir tan mal, no creo soportarlo, sabes, te agradezco mucho que me hayas defendido de esa manera… pero Dylan no quiero que tengas problemas con tu mama por culpa mía.

-Dylan: No no, nena yo te voy a defender siempre, no me importa si es de mi misma madre, no tengo nada que temerle a nadie, y la verdad es que mi mama no tiene derecho a hablarte así.

-Ana Lucia: No entiendo por qué me odia, ¿Qué le hice?

-Dylan: No sé, no se amor, pero no te preocupes, yo no dejare que te haga algún daño, solo quiero que estés segura de que te quiero.

-Ana Lucia: Alguien que me defiende de esa manera, siempre estará a mi lado, yo también te quiero.

Ana Lucia le planto tremendo beso a Dylan.

Marcia le encargo a la cocinera que cuidara de Lyly, y ella salió y arranco el carro de manera muy rápido, manejo por unos cuantos minutos, hasta que llego a la casa de Lucia Cornielle, se bajó del auto y toco el timbre, Lucia apenas escucho dejo de hacer la comida que preparaba y fue a abrir la puerta, cuando lo hizo, Marcia no dudo un minuto en pasar.



-Marcia: Vengo a hablar contigo muy seriamente.

-Lucia: ¡Vaya! Que educación la tuya, Buenas tardes Marcia, ¿Qué deseas?

-Marcia: Mira Lucia tengo muy poca paciencia, vengo a verte porque no es posible que sigas alentando a tu hija para que siga andando con mi hijo.

-Lucia: Una vez más te recuerdo que es mi hijo.

-Marcia: Mira no seas idiota, Lucia te vengo a decir que alejes a tu hija de Dylan.

-Lucia: ¿Por qué? ¿Qué te afecta, porque no quieres que sean amigos?

-Marcia: Bueno eres una idiota, ellos no se ven como amigos, sino como novios, eres estúpida verdad, tú muy bien sabes…

-Lucia: A ver le vas bajando a tus insultos y a tu tono de voz, a mí no vas a decir lo que tengo que hacer, o lo que tengo que decirle o prohibirle a mi hija, te recuerdo muy bien que yo soy buena madre, no como tu una madre controladora…

-Marcia: JAJAJAJAJAJA (Soltó fuerte carcajada) buena madre no me hagas reír, por Dios, una madre no abandona a su hijo.

-Lucia: No lo abandone, te lo di confiando en que iba a ser feliz.

-Marcia: Y lo ha sido, te recuerdo que lo ha sido, pero ahora llegaste tú y tu maldita hija.

-Lucia: Cuidado con lo que dices de ella, además ¿Qué te hizo? Ella no te ha hecho nada, ni yo tampoco, al contrario tú y tu estúpido hermano son los que me han hecho daño

-Marcia: Mira Lucia, no me voy a tentar el corazón, hoy la maldita estaba en mi casa con mi hijo, besándose, y tu aquí pensando que son amigos.

-Lucia: ¿Mi hija estaba en tu casa?

-Marcia: Si la muy perra estaba ahí aplastada como si fuera su propia casa… seguro se empeñó en ir a mi casa, pero la puse en su lugar y la saque a patadas.

-Lucia: Eres una maldita (le soltó cachetada)

Leopoldo salió de hacer los trámites correspondientes para que se procediera a la operación de Susana.



-Patricia: ¿Y que más te dijeron?

-Leopoldo: No mucho, hay que esperar, la cirugía empieza en unos minutos, y llevara bastante tiempo.

-Patricia: Dios quiera que aguante.

-Leopoldo: No lo sé.

-Patricia: ¿Por qué dices eso? ¿Qué te dijeron ahí adentro?

-Leopoldo: Paty.

-Patricia: Dime rápido.

-Leopoldo: El Doctor me dijo que puede ser que Susana tarde hasta meses en reaccionar.

Patricia se sumió en una tristeza grande, y derramo muchas lágrimas.



-Marcia: No me vuelvas a tocas o no respondo.

-Lucia: Y yo te lo advertí, no quiero que toques a mi hija, o Dylan se va a enterar de todo.

-Marcia: ¿De todo? ¿Para qué se entere de que lo abandonaste?

-Lucia: Quizá no me quiera ver, pero a ti te odiara, porque siempre le ocultaste la verdad, así que hagamos a ver quién pierde más.

-Marcia: Eres una perra, pero no te das cuenta lo que sucede, son hermanos no pueden estar juntos, y si se acuestan y si por una imprudencia tu hija queda embarazada. ¿No te preocupa eso?

-Lucia: No, además mi hija tiene mucha educación.

En ese momento Ana Lucia iba llegando a su casa después de haberse despedido de Dylan, Ana Lucia entraba a su casa cuando de inmediato escucho la pelea.

-Marcia: ¿Y eso qué? Son jóvenes, la pasión caliente.

-Lucia: Mira sea como sea, ellos pueden ser felices y hacer lo que se les dé la gana, ¡porque Ana Lucia no es mi hija!



Marcia se quedó boquiabierta con la noticia y al mismo tiempo Ana Lucia igual cerró la puerta y Lucia se dio media vuelta, la miro a los ojos, unos ojos llenos de lágrimas y dolor.

Amor Maldito se pone cada día mejor no dejes de leerla.

Lo que sospechaba que Ana Lucía no era hija de Lucía por eso a Lucía no le preocupaba mucho que ellos fueran novios, lo malo es de la manera como se ha enterado Ana Lucía pero luego que su mamá le explique me imagino que se pondrá feliz al saber que no es hermana de Dylan.

Me encantó como enfrentó Dylan a su madre.

Ojalá Susana logre salir adelante.

Que bien que Leopoldo le finga a Marcia para hundirla.

Gracias por comentar Gloria.

Asi es no es hija de Lucia exactamente ya en el proximo capitulo dara mas detalles de lo que sucedio.