Capitulo 18: No le temas al amor... Leonela

CAPITULO 18



Leonela [Jimena Navarrete] ingresa al salón de belleza, mientras el viento revolotea la larga cabellera de esa hermosa mujer. En ese momento, en donde se encuentra con Lulú [Mellissa Barrera] y Clara [Yanilen] quienes se hacen un manicure, sentadas, mientras cruzan sensualmente sus piernas…

CLARA: Mira, quién tenemos aquí… ¡¡¡Si se trata de la susodicha!!!
LULU: Qué coincidencia que estábamos hablando de ti… Leonela…
LEONELA: ¿Y qué estaban hablando de mí?
CLARA: Hablamos de las razones del por qué terminó tu compromiso con Otto… pero, ¿Cómo pudiste hacerle esto al pobre…?
LEONELA: ¡¡¡Tú no sabes como sucedieron las cosas…!!!
LULU: ¿Ah, si? ¿Quieres que todo el mundo se entere que la gran Leonela Ferrari, rompió su compromiso con Otto Peraza, porque espera un hijo de otro hombre? ¡¡¡Y encima alega que fue violada y ultrajada…!!!
LEONELA: ¡¡¡Es la verdad!!! ¡¡¡He sido violada y ultrajada!!!
LULU: ¡¡¡Conozco a las mujeres de tu calaña… fingen ser buenas y dulces… pero, en realidad, son unas “zorras” baratas…!!!

En ese momento, Leonela le dos cachetadas a Lulú… ¡¡¡PUAFFF!!! ¡¡¡PUAFFF!!! Dejándo la cara marcada de Lulú.

LEONELA: ¡¡¡Tú no sabes como fueron las cosas!!! ¡¡¡Yo soy una víctima!!! ¡¡¡En cambio, tú eres una “zorra” barata porque tomaste del suelo un anillo de segunda mano…!!!
LULU: ¡¡¡Yo no soy una “zorra” barata…!!!

Lulu quiere darle una cachetada pero, Clara la contiene.

CLARA: ¡¡¡Cálmate, Lulú!!! ¡¡¡Recuerda que estás en un sitio público!!! ¡¡¡No te rebajes!!!
LEONELA: Oye, Lulú… tú sola te muerdes…. Pero, nadie verá con buenos ojos a una mujer que le quita el novio a otra, y se ponga el mismo anillo… ¿Dónde quedó tu dignidad, Lulú? Definitivamente, la palabra “dignidad” no está en tu vocabulario… ¡¡¡Y todo porque siempre me tuviste envidia!!!

Leonela se retira dejando a los demás impactados. En la calle, el viento revolotea la larga cabellera de tan hermosa muchacha. Pero, en un parque, la hermosa muchacha decide sentarse mientras cruza sensualmente las piernas. De pronto, una lágrima brota de su mejilla. Porque en el fondo, ella sufre en su interior…

LEONELA: (Dice para sí) ¡Snif! ¡¡Todo se ha complicado!! ¡¡Lulú y Clara son capaces de decírselo a todo el mundo, y a estas alturas, todo Veracruz se da cuenta de lo que me pasó!!

En ese momento, se le aparece un niño, sosteniendo su balón de fútbol, y vestido con una camiseta de las “Chivas Rayadas” del Guadalajara…

NIÑO: ¿Qué le pasa, hermosa señorita? ¿Por qué está llorando?
LEONELA: ¡¡Snif!! Nada… soy una mujer desdichada…
NIÑO: No diga eso, señorita. Usted es una mujer muy bonita para estar sufriendo… cualquiera estaría dichoso de estar junto a una mujer tan bella como usted…
LEONELA: No entiendes la vida de adultos…
NIÑO: Lo que sé es que los adultos se complican mucho la vida… cuando en realidad, la vida es mucho más sencilla de lo que usted piensa…
LEONELA: Y tú, ¿Quién te has creído para hablarme de esa manera, mocoso insolente?

En ese momento, un grupo de niños llama al niño para continuar el juego de Fútbol. Leonela se seca las lágrimas y se levanta de su asiento y se retira del parque.

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Rato después, Leonela llega a la oficina de Otto [William Levy]…

OTTO: ¿Leonela? ¿Qué estás haciendo aquí?

En ese momento, Leonela le da dos cachetadas al hombre… ¡¡¡PUAFFF!!! ¡¡¡PUAFFF!!!

OTTO: Pero, ¿Qué te pasa? ¿Por qué me tratas así?
LEONELA: ¿Te parece poco? ¡¡¡Esto es lo que te mereces por ser tan poco hombre!!! ¡¡¡Al fin, conozco al verdadero Otto!!! ¡¡¡Un cobarde y sinverguenza!!!

En ese momento, llegan los padres de Otto…

SALVADOR: ¡¡¡Qué estás haciendo aquí, Leonela!!! ¡¡¡Tú no tienes ningún derecho de maltratar así a mi hijo!!! ¡¡¡Pretendías utilizar a nuestro hijo para achacarla a un “escuincle” de no-se-sabe-quién lo habrás tenido!!! ¡¡¡Menos mal que nuestro hijo abrió los ojos y se dio cuenta que tú eres una indecente y sucia…!!!
LEONELA: ¡¡¡Jajajajajajajaja!!!
SALVADOR: ¿De qué te ríes?
LEONELA: ¡¡¡Es que al fin, entendí lo que es la aristocracia!!! ¡¡¡La aristocracia es una podrida alma sucia!!! ¡¡¡Y finalmente, abrí los ojos y me di cuenta, que ustedes no son realmente lo que parecen!!! ¡¡¡Por fuera, son los grandes señores…!!! ¡¡¡Pero, por dentro, son solo carroña. ¡¡¡Cuánto no les sirves, pues, te dejan botada por ahí… como si fuera un animal!!!

Leonela se retira de la oficina de Otto.

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Mientras, Ceniel [Diane Lane], Andrés [Al Pacino] y Adela [Michelle Pfeiffer] están en la Mansión pensando…

ANDRES: ¿A dónde nos vamos? ¿Qué les parece si nos vamos a los Estados Unidos? Tengo unos amigos que viven en Chicago y que podrían acogernos allí…
CENIEL: ¡¡¡A donde sea!!! ¡¡¡Todo con tal de huir de los demás!!!
ADELA: ¡¡¡Que vergüenza!!! ¡¡¡Parecemos unos fugitivos!!! ¿Qué de malo hemos hecho?
ANDRES: ¿Te parece poco lo que le hizo Leonela a Otto?
CENIEL: Bueno, bueno… ¿Ya pensaron en un lugar donde podríamos huir?

En ese momento, viene Leonela…

LEONELA: ¡¡¡De ninguna manera!!! ¡¡¡Nosotros no nos vamos a ninguna parte!!!
ANDRES: ¿De qué estás hablando, Leonela?
LEONELA: ¡¡¡He dicho que no nos vamos a ninguna parte!!! ¡¡¡Pues, todo el mundo de la Alta Sociedad de Veracruz sabe de la verdad!!!
ADELA: ¿En serio, hija? ¿Pero, como pudieron enterarse de lo que sucedió?
LEONELA: Fueron Otto… y Lulú.
CENIEL: ¿Otto y Lulú? Pero, ¿Cómo…?
LEONELA: El caso es que no nos vamos a ningún lugar… ¡¡¡Ya no es necesario!!!

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Mientras, en la casa de la familia Guerra en el barrio “Las Barrancas”…

Ernesto [Marcelo Córdoba] llega a la casa, feliz y contento. Lo recibe su familia, y por supuesto, su bella esposa Maricaro [Rebecca Schaeffer]…



ERNESTO: ¡¡¡Familia!!! ¡¡¡Les tengo una buena noticia!!!
MARICARO: ¿Qué quieres contarnos, mi amor?

Ernesto carga a su bella esposa y le da un beso dulce en la boca…

ERNESTO: ¡¡¡Como te adoro, mi amor!!! ¡¡¡Te amo!!!
MARICARO: Yo también te quiero, mi amor, pero, ¿Qué es eso que quieres contarnos?
ERNESTO: ¡¡¡Les cuento que me ascendieron en el banco, como ejecutivo!!!
CARIDAD: ¡¡¡Esa es una gran noticia, hijo!!! ¡¡¡Sabía que lo ibas a lograr!!! ¡¡¡Felicitaciones!!!
ERNESTO: Gracias, mamita. Siempre tan orgullosa de nosotros…
ABUELO: Te felicito, Ernesto. Eres el orgullo de toda la familia.
ERNESTO: Gracias, abuelo.
MARICARO: Felicitaciones, mi amor…
ERNESTO: De nada, mi amor.

Ernesto vuelve a besar y abrazar a su bella esposa. De pronto, Ernesto mira a su hermano Luis Pablo [Jorge Luis Vásquez] que luce pensativo…



ERNESTO: ¿No estás contento, hermano?
LUIS PABLO: ¿Eh? ¡¡¡Por supuesto que si, hermano!!! ¡¡¡Felicitaciones!!!

Ernesto y Luis Pablo se abrazan fraternalmente.

MARICARO: Oye Luis Pablo, ¿Por qué no nos cantas una canción?
TODO: ¡¡¡Si!!! ¡¡¡Qué cante, qué cante!!!
LUIS PABLO: Está bien. Les voy a cantar una canción.
CARIDAD: Orlandito, hijo, pasale la guitarra a tu hermano…
ORLANDITO: Si, mami.

El niño Orlandito le entrega la guitarra a su hermano. Luis Pablo recibe la guitarra y le hace una afinación.

LUIS PABLO: A ver, ¿Alguna petición especial?
CARIDAD: ¡¡¡Cantanos una de Juan Gabriel!!!
MARICARO: Así es… a ti te salen muy bien las canciones de Juan Gabriel…
LUIS PABLO: Hay una en especial que me gusta mucho…

Entonces, Luis Pablo toca los acordes y se pone a interpretar una canción de Juan Gabriel:

“Y todas mi ilusiones/ tuve que hacerlas canciones/ pero despues de tanto cantarlas/ Me llenaron de tristeza de los pies a la cabeza/ tanto que me duele mucho el alma… Muriendo de amor/ muriendo de amor/ muriendo de amor/ por ti/ Yo sigo amandote tanto mi amor/
que me resigno aun/ a ser tu olvido y tu adios/ que te olvides eso es lo que quieres tu.” (“Muriendo de amor”, autor e intérprete: Juan Gabriel)

Los presentes están perplejos por la melancólica interpretación
de Luis Pablo. Es lógico que está triste por la situación que el hombre está atravezando.

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Al dia siguiente…



Luis Pablo entra al jardón de los Ferrari, cuando en ese momento, ve a Leonela. El se emociona al verla tan bella como siempre…

LUIS PABLO: Leonela… qué hermosa estás…
LEONELA: ¡¡¡Qué está haciendo usted aquí!!! ¡¡¡Lárguese!!! ¡¡¡Usted no tiene nada que hacer aquí!!!
LUIS PABLO: Solo quiero preguntarte una cosa… por favor, es solo un momento…
LEONELA: ¡¡¡Yo no tengo nada de qué hablar con usted!!! ¡¡¡Lárguese!!!
LUIS PABLO: Por favor, Leonela… solo quiero saber si has abortado…
LEONELA: Pues, no. No he abortado.
LUIS PABLO: Me alegra que no hayas abortado... es tu hijo...
LEONELA: Pues, para su información… si, este niño nacerá, pero...
LUIS PABLO: ¿Pero, qué? No entiendo nada.
LEONELA: ¡¡¡No lo quiero!!! ¡¡¡No puedo querer a este "escuincle"!!!
LUIS PABLO: Pero, ¿Como puedes no querer a tu propio hijo?
LEONELA: Lo querría si fuese concebido por amor... pero, este "escuincle" fué producto de un acto violento y pensarlo... ¡¡¡Me causa mucho dolor!!!
LUIS PABLO: Lo siento mucho...
LEONELA: No lo sienta, por favor... mi decisión está tomada. Cuando nazca esta criatura, pues... ¡¡¡La regalaré!!!