Capitulo 44: La felicidad es completa [GRAN FINAL]

Capítulo 44 - La felicidad es completa... ¡¡¡GRAN FINAL!!!

ENTRADA:


* * *
Al mediodía.
Colegio ‘’San Pedro’’.
Los niños están por salir del colegio. Hoy salen más temprano porqué tuvieron una prueba y la maestra les dió permiso de salir más temprano, en función de como terminan la prueba. Los primeros salen Beto con Arturo Saúl. Atrás, iban Reynaldito con Rocío. Frente a la salida del colegio, un hombre estacionó su coche, se puso la capucha, cogió dos pañuelos mojados en éter y salió despasito del coche. Se acercó poco a poco detrás de Beto y Arturo Saúl. Llegó detrás de los niños y les tapó las narices y las bocas. Los niños no alcanzaron a gritar porqué, por el éter, se aturdieron. Reynaldito y Rocío gritaban. Los demás niños que salían se pararon asustados en el patio interior del colegio paralizados por el susto. Pero en vano gritaban Reynaldito y Rocío, que el hombre cogió en sus brazos a Beto y a Arturo Saúl y los subió al coche. Arrancó a toda velocidad y se fue. Reynaldito y Rocío se abrazaban temblando de miedo y se metieron en el patio interior del colegio asustados. Las mochilas de Beto y Arturo Saúl quedaron enmedio de la calle. Reynaldito corrió hasta adónde estaban, los levantó y volvió asustado al patio interior del colegio.

ANIBAL SECUESTRO A BETO Y A ARTURO SAUL


* * *
En la carretera.
Beto y Arturo Saúl estaban aún dormidos por el éter en el asiento trasero del coche del hombre. El hombre se quitó la capucha un poco y dejaba ver su sonrisa malévola. Luego se tapó nuevamente la cara.
ANIBAL: ¡Por fín ahora me estoy vengando de todos los que me hicieron daño!
(Aníbal manejaba a toda velocidad rumbo a su escondite.)

-Música incidental (Solo escuchar el video, no ver)-


* * *
Mansión Díaz-Castro.
Irma y Sofía estaban preocupadas, sentían una angustia inexplicable. Rodolfo y Saúl trataban de calmarlas. Doña Victoria y Doña Providencia estaban platicando en el jardín. Reynaldo estaba en la empresa; pero antes pasó por el orfanato. Delfino está al salón principal con Irma y Sofía.
IRMA: (a Rodolfo) No lo se… tengo un presentimiento de lo que va a pasar hoy!
RODOLFO: (abraza a Irma) ¡No te preocupes, mi amor! No creo que algo malo esté pasando. Sino nos avisarían.
SOFIA: (a Saúl) Mi amor… no se… creo que algo malo está pasando…
SAUL: (la abraza) ¡Tranquila, mi amor!
DELFINO: ¡No se preocupen! Si pasa algo malo, os avisarían. Pero no creo que suceda nada malo…
(Las mujeres sonríen. De pronto, suena el teléfono. Irma contesta.)
IRMA: Bueno?! (…) ¿¿Qué?? (se pone pálida y está a punto de desmallarse; Rodolfo la agarra) ¡No puede ser…!
(Irma cuelga. Rodolfo la agarra en sus brazos. Sofía la pregunta preocupada que está pasando. Saúl, abrazando a Sofía, mira a Irma.)
SOFIA: ¿Qué pasa? Te pusiste blanca como un papel…
IRMA: (a Rodolfo) Mi amor… mis sospechas éran ciertas! Sí, pasó algo malo. Secuestraron a nuestro hijo!
RODOLFO: ¿¿QUE??
SAUL: ¿Y te dijeron dónde lo tienen?
SOFIA: ¿Quién lo hizo?
IRMA: No lo se… no le pude reconocer la voz… (asustada, llorando)
RODOLFO: ¡Dios mío! (pausa) ¿Y qué te dijeron?
IRMA: Me llamó alguien… no se, por la voz deformada me parece que éra un hombre… que vendría sola a la vieja cabaña que hay afuera de la ciudad…
SAUL: ¿QUE? Ojalá no sea la misma cabaña que yo estoy pensando que es…
IRMA: ¿Qué cabaña?
SOFIA: ¿Qué cabaña, mi amor?
SAUL: (diciendo que sí con la cabeza) Puede que ese desgraciado sea Aníbal… ojalá no sea la misma cabaña dónde citó a Susana.
IRMA: ¿Cómo?
RODOLFO: (abrazando a Irma) ¡No te preocupes, mi amor! ¡Ve tú sola primero! Saúl y yo estarémos con el comisario detrás sí? Es mejor hacer las cosas bien. ¡Voy a llamar al comisario y salimos!
SAUL: (a Sofía) ¡Ya vuelvo, mi amor!
SOFIA: ¡No te preocupes, mi amor!
(Los dos se besan. Minutos después, Irma y Rodolfo salen con Saúl. Irma agarra el coche y va a la cita con el desconocido. Detrás, pero no muy lejos, iban Rodolfo con Saúl y con el comisario.)
* * *
El abuelo Lorenzo trajo a Reynaldito y a Rocío. Se asombró al oír que Beto y Arturo Saúl fueron secuestrados. Cuando entró al salón principal de la mansión, Delfino abrazaba a Sofía. Lorenzo se acerca a Sofía. Delfino va con Reynaldito y Rocío.
LORENZO: (va con Sofía) ¿Qué pasó?
SOFIA: ¡Parece que secuestraron a Beto! ¡Ojalá mi hijo no esté con él!
REYNALDITO: Estabamos juntos, tía. Ese ladrón se llevó a Beto y a Arturo Saúl!
SOFIA: ¿¿QUE?? (se pone pálida también) ¡Dios mío! (pausa) Tenía que haberme ido con ellos…
LORENZO: ¡No, hija! ¡Fue mejor así, creeme! En estas situaciones es mejor actuar con cautela. No te preocupes que Irma seguro va a traer sano y salvo a su hijo y al tuyo también.
SOFIA: ¡Ojalá!
(Lorenzo abraza a Sofía. Los niños suben a cambiarse el uniforme y a lavarse las manos antes de la comida.)

IRMA Y SOFIA PREOCUPADAS POR SUS HIJOS


* * *
Cabaña abandonada.
Aníbal trajo a los niños a la cabaña. Los niños aún estaban drogados por el efecto del éter. Aníbal los sacó de su coche y los acostó en una cama de cartón que había allí esperando que poco a poco éstos despertáran. Se sentó en una silla, tenía un arma en la mano y jugaba con ella apuntando a los niños. Estaba ya perdiendo la paciencia… no quiería matar a los niños sin que éstos sean concientes de la tremenda muerte que los esperan. De pronto, uno de los niños empieza a moverse, abre los ojos y se despierta amordazado. Mira a Arturo Saúl quien estaba bajo el efecto del éter. Beto se asusta al ver a su tío. Aníbal lo saluda sonriendo malévolo.
ANIBAL: ¡Bienvenido a tu palacio!
BETO: (se asusta al ver a su tío) ¿Tío Aníbal? ¿Viniste a salvarnos? (lo dijo esperanzados)
ANIBAL: (solo puede reír) Jajaja… pero que ingenuo eres, sobrinito! (esa última palabra la articuló de una manera muy especial) Aún no te das cuenta de una cosa: (Beto lo mira confundido) de lo mucho que te odio… a ti (lo apunta con la pistola mientras jugaba con ella) y a tu madre!
BETO: (triste, llorando) ¿Por qué, tío? ¿Qué te hicimos nosotros?
ANIBAL: (golpea con la pistola en la mesa; los niños se asustan) ¡Ya basta de tanta lloradera! ¡Odio los mocosos llorones!
(Beto reprime su llanto. Arturo Saúl se despierta poco a poco. Se asusta al encontrarse en un lugar tan poco recibidor. Aníbal ve que el niño despertó y le da la conocida bienvenida.)
ANIBAL: (irónico) Hasta que por fín despertó el principe ¿no?
ARTURO SAUL: (asustado) ¿Quién es usted? ¿Por qué estamos aquí?
BETO: (a Arturo) Parece que es un ajuste de cuentas…
ANIBAL: (al oír a Beto enfurece más) ¡CALLATE! Sino quieres que te mate aquí mismo y termine ya con esta farsa!
(Los niños temblaban de miedo.)
ARTURO SAUL: (a Beto) Si Dios nos salva de esta, te juro que ahora sí voy a aceptar a Saúl como mi papá… ya no lo voy a tratar mal…
ANIBAL: ¡YA CALLENSE! (lo dijo despues de golpear la mesa) ¡Ojalá llegue tu madre eh! Porqué sino… me veré en posición de matarlos!
BETO: (llorando, enfurece) ¡A mi mamá la dejas en paz!
ARTURO SAUL: ¡Ojalá y te agarre la policía!
ANIBAL: (suelta una carcajada) Jajaja… ¡malditos escuincles! ¡Justamente de la policía estoy huyendo!
BETO: ¡Pues te van a agarrar!
ANIBAL: (golpeando la mesa) ¡YA CALLENSE!

ANIBAL SECUESTRO A BETO Y A ARTURO SAUL


* * *
En la carretera.
En el coche de policía. Un oficial estaba manejando. Al lado del chofer estaba el comisario, mientras que en los asientos traseros del coche estaban Rodolfo y Saúl. Todos estaban bastante preocupados. El comisario no quiería que Aníbal se le escape otra vez, mientras que Rodolfo y Saúl tan solo quierían que sus hijos estén libres.
RODOLFO: ¡Ojalá lleguemos pronto! Porqué les juro que si ese imbécil toca a mi hijo, lo mato!
COMISARIO: ¡No se preocupen! ¡Ese hombre está casi muerto! ¡No se volverá a escapar! Lo tendrémos rodeado.

EL COMISARIO ESTA POR ATRAPAR A ANIBAL



* * *
Minutos después.
Cabaña abandonada.
Dentro de unos minutos, Irma llega adónde el desconocido con la voz deformada la había citado. Estaciona el coche y entra en la cabaña. La cabaña sigue igual: un olor insoportable a viejo e insalubre lugar, cosas llenos de polvo etc. Irma entra en la cabaña temerosamente. Aníbal la esperaba dentro, armado, teniendo a los niños amarrados. Afuera, el coche de policía llega. No tenía las sirenas prendidas para que Aníbal no huya. El coche estaciona; Rodolfo y Saúl se bajan. El comisario manda a los policías a que rodeen el lugar. Los policías, armados, rodean la cabaña, apuntando con las armas hacia la cabaña. Mientras los policías rodean el lugar, el comisario les da órdenes a Rodolfo y a Saúl.
COMISARIO: ¡Quedense aquí! Nuestros hombres tienen la situación bajo control!
SAUL: (desesperado) ¡No me puedo quedar aquí de brazos cruzados cuando a mi hijo lo tienen secuestrado allí dentro!
RODOLFO: (lo calma) ¡Ya, hombre! El comisario sabe lo que hace. ¡Confía en él!
COMISARIO: ¡Exactamente! Tengo un plan que esta vez es infalible!
* * *
Mientras que dentro de la cabaña.
IRMA: (fría) ¿Para qué me citaste aquí?
ANIBAL: (voltea y la mira de arriba abajo) Mmm… (mordiendose el labio) ¡Hasta que por fin llegas! ¡No tengo tu tiempo!
BETO: (amarrado; ve a su mamá) ¡Mamiiii!
IRMA: (mira a su hijo amarrado, luego a Aníbal) ¡Desamarra a mi hijo!
ANIBAL: (suelta una carcajada) Jajaja… ¿tú crees que puedes venir aquí a darme órdenes?
IRMA: (decidida) ¡Suelta a mi hijo o me voy!
ANIBAL: (suspira) Ok… ok… (sin dejar de apuntarla con el arma; va hacia Beto y le desamarra) ¡Ya! ¿Satisfecha?
(Aníbal se sienta en una silla, con las piernas cruzadas encima de la mesa. En su mano tenía la pistola.)
IRMA: (de pie; decidida; mira a Arturo Saúl también amarrado) ¡No! ¡Desamarra a Arturo también!
(Al oír eso, Aníbal enfurece, se levanta pegando con la mano donde tenía la pistola, en la mesa.)
ANIBAL: ¡YA BASTA! ¡Solté a tu hijo, pero no me vas a obligar a soltar a este bastardo también!
IRMA: (de pie; retándolo) Ahh ¿no? Bueno… pues en este caso yo ya no tengo nada que hacer aquí!
(Irma voltea para irse, cuando Aníbal la coge del brazo y la empuja a la cama de cartón dónde estaban los niños. Irma cae, pero se queda mirandolo.)
ANIBAL: ¡Tú de aquí no te vas!
(En cuanto lo soltó, Beto corrió afuera de la cabaña dejando la puerta abierta. Cuando salió de la cabaña corrió a los brazos de Rodolfo. Ve la policía alrededor de la cabaña, pero el comisario le dice que mantenga la boca cerrada.)

IRMA FRENTE A FRENTE CON ANIBAL


* * *
Afuera de la cabaña.
Beto llega corriendo a los brazos de Rodolfo. Rodolfo lo coge en sus brazos. El niño tenía miedo. Saúl también se acerca a él.
BETO: ¡Papá!
RODOLFO: ¡Mi amor! (lo coge en sus brazos) ¿Qué pasó? ¿Cómo está tu mamá?
BETO: Mi mamá está dentro. Mi tío Aníbal nos amarró. A mí me soltó porqué vino mi mamá… y si la vieras, papá… estaba decidida, le habló así de frente. (sonriendo, finjiendo la voz) ‘’¡Suelta a mi hijo o me voy!’’… y no tuvo de otra que soltarme!
SAUL: (preocupado; a Beto) Y… ¿qué le hizo a mi hijo? ¿Está bien?
BETO: Noo… no lo quizo soltar… pero está bien.
SAUL: (enfurece; pero el comisario lo detiene) ¡Yo entro! ¡Y le parto la cara!
COMISARIO: (lo detiene) ¡NO! Es mejor que nos deje a nosotros hacer nuestro trabajo! (les hace una seña a los demás policías para que empieze la operación)
POLICIA 1: (dice mientras apunta con el arma la entrada a la cabaña) ¡Aníbal Díaz-Castro! ¡Sal con las manos en la cabeza! ¡Entregate! ¡Estás rodeado! ¡No tienes escapatoria!
COMISARIO: (hablando por el portavoz) ¡Aníbal Díaz-Castro! ¡Sal con las manos en la cabeza! ¡Entregate! ¡Estás rodeado! ¡No tienes escapatoria!

LA POLICIA RODEA LA CABAÑA


* * *
Mientras que dentro de la cabaña.
Aníbal apuntaba con el arma a Irma. El niño estaba llorando, mirando aterrado. Mientras Aníbal apuntaba con el arma a Irma, escucha la policía y enfurece.
ANIBAL: ¡Maldita perra! (le pega una bofetada que la mujer cae en la cama de cartón al lado del niño) ¡Te dije que vinieras sola! ¡Muy bien! Pues tanto este maldito engendro como tú, pagarán las consecuencias!
(Irma lo miraba aterrada. Aníbal enfurece, la jala de la mano y la voltea poniendole la pistola en la cabeza. A Irma no le queda de otra que dejarse llevar. Aníbal la empuja hacia la puerta.)
ANIBAL: ¡Vamos! ¡Fuera! (dijo mientras la apuntaba con la pistola en la cabeza)
IRMA: (con miedo) ¿Qué me vas a hacer?
ANIBAL: (furioso, gritando) ¡CALLATE!!! ¡O te mato aquí mismo!!!

A ANIBAL SE LE ESCAPO EL DIABLO


* * *
Afuera de la cabaña.
Aníbal sale de la cabaña apuntando con el arma en la cabeza a Irma. Los policías lo apuntan con el arma. El comisario también lo apunta con el arma, mientras que en la otra mano tenía el portavoz. Rodolfo se queda mirando a Irma. A Aníbal solo lo puede mirar con odio. Saúl no ve por ninguna parte a su hijo.
SAUL: (despasito, le pregunta al comisario) ¡Si este imbécil le hizo algo a mi hijo, le juro que lo mato con mis propias manos!
COMISARIO: (despasito, a Saúl) ¡Tranquilo!
ANIBAL: (apuntando con la pistola en la cabeza a Irma) ¡Dejen las armas al suelo o la mato!
(Los policías no hacen ningún gesto. El comisario les ordena que obedezcan.)
COMISARIO: ¡Dejen las armas!
(Los policías se agachan despasito y dejan las armas al suelo.)

ANIBAL MANEJA COMO QUIERE LA POLICIA; TIENE PRESA A IRMA




COMISARIO: ¡Aníbal, entregate! Es lo mejor que puedas hacer. Si te entregas solo, podemos rebajarte la condena!
ANIBAL: (gritando) ¡ESO NUNCA! Prefiero la muerte que pisar una cárcel!
IRMA: (hablaba con miedo) ¡Entregate! ¡Es lo mejor para todos!
ANIBAL: (gritando) ¿Para todos? ¿Para cuál todos? ¿Para que te vayas con el imbécil de mi hermano?? ¡Noo!!! ¡Prefiero saberte muerta que con ese imbécil!
SAUL: ¿Dónde está mi hijo, imbécil?
ANIBAL: Mmm… ¡vaya! (a Saúl) ¡De ti también dije que voy a vengarme, imbécil! Y mi venganza será que núnca más vuelvas a ver a tu hijo!
(Saúl se abalanza contra Aníbal, pero Rodolfo y el comisario lo agarran.)
COMISARIO: ¡Ya, tranquilo! ¡Seguro debe estar en la cabaña! ¡No se preocupe, que nada le va a hacer!
SAUL: (furioso) ¡Lo mato! ¡Les juro que si le toca un pelo a mi hijo, lo mato!
COMISARIO: ¡Vamos, Aníbal, entregate! ¡Entregate, acepta tus crimenes y yo mismo me encargaré de que te rebajen la condena!
ANIBAL: (sigue apuntando con la pistola en la cabeza a Irma) Jajaja… ¡ESO NUNCA! ¿Para qué? ¿Para morir en una cárcel? ¡Noo!
(Aníbal camina jalando a Irma. Seguía apuntando en la cabeza a Irma.)
ANIBAL: ¡Vamos! ¡Camina!
(Aníbal se lleva a Irma rumbo al bosque. Los policías se quedan mirando. Se agachan y cogen sus armas. Después de tomar un buen avanse, el comisario ordena que lo siguen.)
COMISARIO: ¡Siguenlo!
(El comisario también va detras de Aníbal. Al ver irse a Aníbal, Rodolfo sale corriendo detrás de ellos. Saúl entra corriendo en la cabaña en busca de su hijo.)

ANIBAL ESCAPA POR EL BOSQUE


* * *
Aníbal corre para que la policía no lo agarre. Irma no corre igual de rápido que él porqué queda siempre atrás. Aníbal voltea para cogerla de la mano. No quiería que la mujer dejára de seguirlo y se regrese.
ANIBAL: ¡Vamos! ¡Tú te irás conmigo!
IRMA: (quejandose) ¡Ya! ¡Sueltame…! ¡Me cansé…! ¡Vamos a descansar un rato!
ANIBAL: (irónico) ¿Un café no querrás? (la jala de la mano, pero se le escapa) ¡Vamos! ¡O te pego un tiro aquí mismo!
(Rodolfo corría detrás para alcanzarlos. Aníbal corría obligando a Irma correr detrás de ella. La mujer corría lento porqué quedó atrás. Aníbal voltea la cabeza para apurarla. Pero ese error le costará la vida, porqué al voltear la cabeza no ve que entró en una zona con colmenas. Al voltear la cabeza no ve que se acerca a una colmena y tropieza con ella. La colmena cae al suelo y de allí empiezan a salir todas las abejas. Irma se echa para atrás del susto. Rodolfo alcanza a Irma y la abraza. Irma se abraza a él.
IRMA: ¡Mi amor!
RODOLFO: ¡Tranquila!
(Rodolfo abraza a Irma para tranquilizarla. Los dos miran como Aníbal ya no tiene escapatoria. Se enfoca a Aníbal gritando y moviendose tratando de zafarse de las abejas, pero ella están decididas en perjudicar al que les molestó la colmena.
ANIBAL: ¡Abejas! (aterrado) ¡NOOOO!!!

(Aníbal se está moviendo demasiado, pero las abejas tampoco lo quieren dejar en paz. Irma y Rodolfo miran aterrados tal escena. Ya nada podía hacerse.)
IRMA: (abrazada a Rodolfo) ¡Mi amor, sálvalo!
RODOLFO: (abraza a Irma) ¡Ya no se puede hacer nada…! Él eligió semejante sufrimiento…
(Se enfoca a Aníbal caído en la hierba con un montón de abejas encima de él moviendose.)

(***Imaginense a Valentino Lanús así***)

* * *
Minutos después.
Irma y Rodolfo llegan al lugar dónde estaba el comisario. Saúl ya estaba en el coche con su hijo y Beto. El comisario manda a llamar a una ambulancia para que venga por Aníbal. Irma y Rodolfo se suben al coche. Estaban felices de volver a ver a su hijo. Beto ve a lo lejos, venir del bosque, a un hombre desfigurado que se arrastraba. Se enfoca a Aníbal arrastrandose por el dolor que tenía. Todos miran hacia allá. Se enfoca a Aníbal solo poder decir una cosa.
ANIBAL: ¡A-yu-de-me…!
(Aníbal se desmayó por el dolor. Estaba totalmente desfigurado.)

(***Igual, imaginense así a Valentino Lanús***)

* * *
Hospital Central.
Terapia Intensiva.
En el salón estaban el doctor, Reynaldo y Rodolfo. Afuera, en la sala de espera, estaban Diana con Reynaldo, Sofía con Saúl, e Irma con Beto y Arturo Saúl. Arturo Saúl estaba con su mamá que ya la extrañaba. Beto estaba con su mamá.
En Terapia Intensiva.
El medico les cuenta el estado crítico en el cual se encuentra Aníbal.
RODOLFO: ¿Cómo se encuentra, doctor?
MÉDICO: ¡Lo siento mucho, de verdad! El veneno llegó a penetrarle todo el cuerpo, por eso tiene esos profundos dolores.
REYNALDO: No pensé que le cabía más veneno en el cuerpo…
MÉDICO: (negando con la cabeza) ¡No tiene escapatoria! El veneno de las abejas es muy fuerte y produce primero estos dolores y poco a poco la muerte.
(Se enfoca a Aníbal quien se mueve un poquito quejandose.)
ANIBAL: Mmm… Ro-dolfo…
REYNALDO: (a Rodolfo) ¡Te está llamando a ti!
(Rodolfo se acerca a Aníbal. Se enfoca el rostro totalmente desfigurado e inchado de Anibal.)

(***Imaginense así a Valentino Lanús***)

RODOLFO: (de pie, mirandolo) Dime…
ANIBAL: Quie-ro… ver… a… Beto…
(Rodolfo se quedó callado. El médico habla.)
MÉDICO: ¡Es mejor concedirle la voluntad!
RODOLFO: (suspira) Está bien… ya te lo traigo!
(Rodolfo sale del salón para traer a Beto.)
* * *
Minutos después, la puerta se abre y Rodolfo trae a Beto. Beto entra temerosamente. Rodolfo lo acerca a Aníbal.
ANIBAL: A-cer-cate…
(Aníbal estiró la mano. Beto se acerca temerosamente. Lo miraba… sentía pena. Rodolfo se acerca con él.)

(***Imaginense la mano de Valentino Lanús***)
ANIBAL: ¡Dame tu mano…!

(***Imaginense la mano de Valentino Lanús***)
(Beto se acercó y le cogió la mano a Aníbal. Tenía la esperanza de que Aníbal, al menos ahora, le demuestre un poco de cariño.)

ANIBAL: (lo mira fijamente, lleno de odio) ¡Maldito engendro! Hay algo más que aún no te dije! (lo dijo mientras también miró a Rodolfo –quien le suplicaba con la mirada que calle- ) Sí… tú, maldito engendro… ¡eres mi hijo!
(Estas últimas palabras sonaron como puñal en el corazón del niño. Rodolfo lo miraba con odio. No quiería odiarlo ahora que estaba a punto de morir, pero su hermano se lo ganó a pulso.)
ANIBAL: ¡Por… tu culpa, maldito engendro… por tu culpa estoy aquí!
(Al haber dicho eso, Aníbal soltó la mano del niño. Su mano cayó inerta en la cama. La cabeza de Aníbal cayó inerta en la almohada. El sonido del aparato pitaba en señal de que el paciente murió. Aníbal murió. Se enfoca el rostro de Aníbal totalmente desfigurado por las abejas, y sus ojos abiertos como platos: un paisaje maquíavélico. Beto no sabía que tenía su papá.

(***Imaginense así a Valentino Lanús***)
BETO: (llorando) Papá… ¡no te mueras, papá! ¡Yo te quiero! ¡Aunque tú me odies, yo sí te quiero, papá! ¡No me dejes!
(Beto estaba llorando la muerte de Aníbal, aunque no se lo merecía, pero igual y no podía evitar llorar. Rodolfo se acerca al cadaver de su hermano, y le pasa la mano por sus ojos cerrandoselos.)

LA MUERTE DE ANIBAL; MUERTO EL PERRO SE ACABO LA RABIA

(***Imaginense así a Valentino Lanús***)

-Música incidental (Solo escuchar, no ver el video!)-


* * *
Meses después.
Departamento de Macarena.
Macarena se estaba arreglando para la boda triple que tenía lugar ese mismo día. Delfino vestía un traje elegante que Reynaldo le compró. Reynaldo toca el timbre. Macarena le dice desde la habitación a Delfino para que abra.
MACARENA: ¡Abre, hijo!
DELFINO: Sí, mamá.
(Delfino va a abrir. Reynaldo entra.)
REYNALDO: ¡Uyy, que bien te vez eh, campeón! Verás que todas las chicas las vas a volver locas jeje! ¿Y tu mamá?
DELFINO: ¡Se está arreglando!
(Viene Macarena. Reynaldo se queda mirandola. Delfino va con su mamá y le ofrece el brazo. Macarena lo toma del brazo.)
DELFINO: ¡Te vez lindísima, mami! ¿Verdad Reynaldo?
MACARENA: ¡Gracías, mi amor!
REYNALDO: Cláro… se ve lindísima.
MACARENA: ¡Gracías, Reynaldo!
(Reynaldo va hacia la puerta, abre y los deja salir primero. Salen los tres para ir a la boda.)

MACARENA ADOPTO A DELFINO


* * *
Mansión Díaz-Castro.
Las tres novias están arreglandose para el día más felíz de sus vidas. Reynaldito, Beto y Arturo Saúl estaban ya vestidos y ya se habían ido para iglesia con sus padres. En la casa solo quedaron Diana, Irma y Sofía, y cláro, las mujeres que las maquillaban y arreglaban. Doña Victoria, Estrella y Lorenzo estaban en el coche frente a la iglesia.

* * *
Iglesia.
La gente llega poco a poco a la boda. Enfrente del altar estaban emocionados, vestidos con trajes elegantes, Reynaldo, Saúl y Rodolfo. Los nervios los mataban.
* * *
Minutos después.
Afuera de la iglesia estaciona la limusina. De ella bajan las tres novias. Todo el mundo estaba en la iglesia. Las mujeres lucen muy bellas, caminando hacia al altar. Reynaldito, Beto y Arturo Saúl iban detrás de sus mamás, sosteniendoles el vestido que traía una cola muy larga. Los novios las miraban con amor y dulzura. Éran las novias más bellas del Universo. Poco a poco, las novias se acercan. Los novios les dan las manos y ellas se sientan al lado de sus respectivas parejas. Diana y Reynaldo se sonreían felices. Sofía y Saúl e Irma y Rodolfo seguían el ejemplo. El cura empieza la misa.

PARTICIPACION ESPECIAL:
AARON HERNAN COMO EL SACERDOTE


CURA: ¡Estamos aquí reunidos para celebrar la boda de estos seis ciervos que decidieron unir sus vidas ante Dios y ante el hombre!
(El cura seguía con su misa, mientras que los novios se sonreían el uno al otro.)
CURA: ¡Diana Ruíz! ¿Aceptas por esposo a Reynaldo Díaz-Castro para amarlo, respetarlo, serle fiel en la riqueza y en la pobresa, en la salud y en la enfermedad?
DIANA: (mira a Reynaldo y le sonríe) ¡Sí, acepto, padre!
CURA: ¡Reynaldo Díaz-Castro! ¿Aceptas por esposa a Diana Ruíz para amarla, respetarla, serle fiel en la riqueza y en la pobresa, en la salud y en la enfermedad?
REYNALDO: (mira a Diana y le sonríe) ¡Sí, padre, acepto!


CURA: ¡Sofía Ruíz! ¿Aceptas por esposo a Saúl Robles Suárez para amarlo, respetarlo, serle fiel en la riqueza y en la pobresa, en la salud y en la enfermedad?
SOFIA: (mira a Saúl y le sonríe) ¡Sí, acepto, padre!
CURA: ¡Saúl Robles Suárez! ¿Aceptas por esposa a Sofía Ruíz para amarla, respetarla, serle fiel en la riqueza y en la pobresa, en la salud y en la enfermedad?
SAUL: (mira a Sofía y le sonríe) ¡Sí, padre, acepto!


CURA: ¡Irma Pérez! ¿Aceptas por esposo a Rodolfo Díaz-Castro para amarlo, respetarlo, serle fiel en la riqueza y en la pobresa, en la salud y en la enfermedad?
IRMA: (mira a Rodolfo y le sonríe) ¡Sí, acepto, padre!
CURA: ¡Rodolfo! ¿Aceptas por esposa a Irma Pérez para amarla, respetarla, serle fiel en la riqueza y en la pobresa, en la salud y en la enfermedad?
RODOLFO: (mira a Irma y le sonríe) ¡Sí, padre, acepto!


CURA: ¡Por los poderes que me da la Iglesia os declaro marido y mujer! (el cura sonríe) ¡Pueden besar a sus novias!
(Reynaldo voltea hacia Diana y los dos se funden en un solo beso. Saúl voltea a Sofía, le acarisia la cara y se funden en un solo beso. Rodolfo voltea a Irma, le acarisia.)
RODOLFO: ¡Te amo…!
(Los dos también se funden en un solo beso. La gente aplaude. Todos son felices. Los niños están muy felices.)

* * *
Horas después.
Aeropuerto.
Se enfoca a Antonio jalando una maleta. Pasa por los procedimientos necesarios, va a la documentación, averigua su vuelo para Brasil. El vuelo sale en dos horas. Llegó justo a tiempo. Se dirige para embarcarse. Se queda unos segundos y suspira.
ANTONIO: ¡Dios mío! ¡Ahora a empezar una nueva vida!
(Coge nuevamente su maleta y se embarca al avión rumbo a Brasil. Después de unos minutos se enfoca un Antonio sentado en su asiento en el avión. El avión comienza a decolar. Antonio mira por la ventana y suspira felíz.)

ANTONIO SALE PARA BRASIL


* * *
Días después.
Yate de la familia Díaz-Castro.
Toda la familia está pasando un lindo día en el yate. Éra un día asoleado. Los pajaros cantaban felices. El mar hacía un ruido, parecía estar felíz. Los niños jugaban juntos en el velero. Doña Victoria y Doña Providencia estaban tomando unos tés y platicando en la cabina del yate. Doña Victoria le contaba sobre aquel día cuando su esposo fue asesinado por su propio hijo. Doña Providencia le contaba también sobre su marido. Sin saber, las dos se entienden muy bien, como dos amigas que núnca antes se habían visto.
Las parejas están disfrutando de su amor. Diana vestía un bikini sexy, color rojo. Reynaldo solamente llevaba unos pantalones cortos. Se enfocan los dos tomando champagne, sentados, Reynaldo manejando el velero.

Sofía y Saúl estaban sentados delante del velero. Saúl llevaba unos pantalones cortos solamente –igual que Reynaldo- . Sofía tenía un bikini muy sexy, color rosa. Saúl estaba sentado en la parte de enfrente del velero. Sofía estaba a su lado. Él le sirve otra copa de champagne. Se sirve él también.
SAUL: ¡Te amo…! ¡No quiero volver a separarme de ti núnca más!
SOFIA: Yo tampoco, mi amor. Estos meses sin ti me parecieron eternos…
SAUL: Para mí es como si fueron años… no años… siglos…
(Los dos ríen. Saúl se acerca a ella y le besa dulcemente. Ella le corresponde al beso.)


Irma y Rodolfo están también felices. Están detrás del yate. Rodolfo se apoyaba con la espalda en la barandilla del yate. Estaba abrazando por detrás a Irma, dandole besos por los hombros.
RODOLFO: ¿Lo recuerdas, mi amor?
IRMA: Mmm… (disfrutando sus besos) ¿recordar qué?
RODOLFO: El día en que nos conocimos… fue aquí, en el mismo velero.
IRMA: ¡Lo se, mi amor! Y como que después de aquel día empezaron nuestros desgracias…
RODOLFO: ¡Ya! (le acarisia) ¡No pensemos cosas tristes! ¡Más bien seamos felices! (le besa el hombro) Sabes… (le acarisia) me gustaría que tuvieramos un bebé más… ¿qué dices? Al regresar a la mansión ¿nos vamos juntitos a Cancún unos días más?
IRMA: (voltea, le acarisia la cara bajando por sus brazos) Me encantaría, mi amor…!
RODOLFO: ¡Entonces así vamos a hacer, mi amor! ¡Te amo tanto…!
IRMA: ¡Y yo a ti!
(Los dos se besan tiernamente.)


-Canción de fondo: Llegaste tú - Jesse y Joy (Solo escuchar, no ver el video!)-


Con ellos también estaba la madre Macarena, que ya no éra madre. Ella es una mujer perfectamente normal. Desde que adoptó a Delfino es una mujer muy felíz. Delfino está con los demás niños. Se enfocan a Diana y a Reynaldo, Reynaldo manejando el velero. Con ellos aparece Reynaldito con Delfino. Los dos éran traviesos.
REYNALDITO: ¡Papá! ¡Papá! (viene con la cámara) ¡Una foto de familia!
(Reynaldo y Diana ríen. Reynaldito logra hacer una foto en movimiento. Reynaldo se levanta.)
REYNALDO: (a Reynaldito) ¡Hijo, ve a avisar a tus abuelas que vamos a hacer unas fotos de familia! (a Delfino) ¡Y tú, hijo, ve por los demás y avisales!
REYNALDITO: ¡Ya, papá! (Reynaldito se va corriendo.)
DELFINO: ¡Sí, papá! (Delfino también se va corriendo.)

Dentro de unos minutos, todos se juntan para unas fotos en familia. Reynaldo acomoda la cámara para que tome varias fotos autómaticamente. Reynaldo arregla la cámara mientras la familia cambia de posiciones. En las fotos, Reynaldo y Diana salen juntos en las fotos juntos con sus hijos: Reynaldito y Delfino.

Macarena también sale en las fotos con Delfino. Diana aceptó sin chistar que Reynaldo sea el padre de Delfino.

Sofía y Saúl salieron juntos en las fotos; junto a sus hijos: Arturo Saúl y Rocío.

Irma y Rodolfo salieron juntos en las fotos. También salieron junto a su hijo Beto.

Reynaldo también sorprendió momentos memorables: como por ejemplo a los niños haciendo todo tipo de muecas a la cámara, deliciosos besos entre él y Diana, Sofía y Saúl e Irma y Rodolfo.

Al final, en la pantalla se enfocan todos tomando champagne, las tres parejas principales, los hombres teniendo en sus manos sus copas con champagne, mientras estaban besando a sus mujeres. La historia termina en esos deliciosos besos que las parejas se daban. Los niños jugando. En la pantalla también aparecen las fotos que se tomaron. Como canción de fondo se escucha: Llegaste tú – Jesse y Joy. También en la pantalla aparece en un rincón ‘’FIN!’’. Esa mágica palabra ¿marca el fin o el comienzo de una nueva vida de los personajes? ¡Sí, no hay duda! Marca el comienzo de una nueva vida…


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Mil felicidades Joana por haber finalizada esta interesante historia que aunque solo he leído los primero capítulos, me atrapó, así que terminaré de leerla completa en el canal 3, el de las producciones finalizadas, a donde trasladaremos el día de mañana.

Felicidades y gracias por esa gran historia, Joana.

De nada, Gloria, cuando tengas tiempo
te digo que yo estoy en las mismas. Quiero leer, pero me pierdo entre todas jijijii

Besos

Sí es que tenemos que organizarnos para poder leer, yo ya estoy leyendo solo 21 que escogí al azar y cuando las termine leeré las otras 13 que me faltan más las que sigan.

Pues si, yo leo de manera desordonada
tendre que ordenar las producciones ^^ y llevar una orden n.n