Capitulo 22: No le temas al amor... Leonela

CAPITULO 22

En el Penal de Allende, Luis Pablo [Jorge Luis Vásquez] está cara a cara con el reo apodado como “El Medusita” [Fernando Allende]…

LUIS PABLO: ¿Por qué me dice usted, “niño bello”?
MEDUSITA: Porque me pareces muy bello…
LUIS PABLO: bello, yo?
MEDUSITA: si...eres muy bello.

El “Medusita” le guiña el ojo a Luis Pablo.

LUIS PABLO: ¿Perdón? ¿Se siente usted bien?
MEDUSITA: ¡¡¡Para nada!!! ¡¡¡Estoy muy pero, muy bien…!!! Pero, dime, “Niño Bello”…
LUIS PABLO: Perdón, pero, mi nombre es Luis Pablo Guerra…
MEDUSITA: ¡¡¡Vaya!!! ¡¡¡Te llamas Luis Pablo Guerra!!! ¡¡¡Parece nombre tomado de una telenovela venezolana que vi hace tiempo!!! ¿O era Pedro Luis? No me acuerdo… pues, bien, Luis Pablo, ¿Qué has venido a hacer por aquí?
LUIS PABLO: ¡¡¡Vine aquí por un error!!! ¡¡¡Yo soy inocente!!!
MEDUSITA: Eso decimos todos…
LUIS PABLO: Pero, en realidad, yo soy inocente… ¡¡¡Yo no hice nada!!! ¡¡¡Se lo juro por mi madresita que es lo que más quiero!!!
MEDUSITA: ¿Quieres mucho a tu “mamita”, verdad? ¡¡¡Qué tierno eres, aparte de bello!!! Eres un hombre admirable… como muy guapo…

LUIS PABLO: yo lo unico que quiero es salir de aqui. Soy inocente.
MEDUSITA: Pero vienes llegando...no seas malo.


El “Medusita” vuelve a guiñarle el ojo a Luis Pablo.

LUIS PABLO: ¿Le sucede algo, señor… ejem… como dijo que se llamaba?
MEDUSITA: A mi me dicen “El Medusita”… pero, no te asustes conmigo, solo quiero protegerte y para advertirte que aquí en el Penal de Allende impera la ley del más fuerte

LUIS PABLO: como? el mas fuerte?
MEDUSITA: niño bello...estas en la carcel. Date cuenta que no es otro lugar mas feo del mundo.
LUIS PABLO: Yo...
MEDUSITA: aqui solo mando yo...yo soy el que ordena, el que dispone.
LUIS PABLO: pero usted...

Medusita toma el moño y juega con el en sus manos.

MEDUSITA: yo soy el jefe, aqui manda el dinero...y el que tenga más dinero, sobrevive. Ya te darás cuenta. Permiso.

El “Medusita” vuelve a guiñarle el ojo a Luis Pablo pero, él sigue sin entender su reacción, y el “Canicas” le habla…

CANICAS: Chale, carnal, cuídate del “rarito” ese… no me gusta como te mira…
LUIS PABLO: Pues, la verdad, me es indiferente ese señor… espero que pronto pueda probarse mi inocencia y así poder largarme de este horrendo lugar…
CANICAS: huyy apà...no creas tanto en los reyes. Si te acusan de haberte "hechado" a un cristiano. Pos como quieres salir pronto.
LUIS PABLO: yo debo salir pronto de aqui. Por mi familia, por mi madre...por mi...por mi hijo.

El Canicas se acerca a él.

CANICAS: chale...tienes un hijo?
LUIS PABLO: si...bueno no
CANICAS: como? si o no?
LUIS PABLO: todavia no se que será...aun no nace.
CANICAS: ah bueno...pero te digo algo, eh? ni te me emociones. Sobra decirte mi hermano, que te falta el juicio, y ya verás cuantos te entamban aqui.
LUIS PABLO: no...yo voy a salir. tengo que estar libre.
CANICAS: bueno...yo te lo dije, eh?
LUIS PABLO: no puedo quedarme aqui...no puedo.

CANICAS: Bueno, lo que es yo… me voy a tomar una siesta… permiso…

El “Canicas” se recuesta en su cama y duerme un rato. Luis Pablo mira al techo, reflexionando las palabras de aquel hombrecillo: Donde impera la ley del mas fuerte y de mas dinero, sobrevive.

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En la casa de los Guerra…

Caridad [Ana Martin] llega con su nuera, la bellísima Maricaro [Rebecca Schaeffer], cuando lo recibe Ernesto [Marcelo Córdoba] con el abuelo [Germán Robles]…

ABUELO: ¿Qué pasó? ¿Cómo les fué a ustedes en el Ministerio?
CARIDAD: ¿Dónde está Orlandito?
ERNESTO: Pues, ha ido a jugar fútbol con sus amigos, pero, ¿Qué pasó? ¿Hay alguna esperanza que podamos sacar a Luis Pablo de ese lugar?
CARIDAD: ¿La verdad? Pues, tengo muy poca fe que podamos sacar a Luis Pablo de allí…
ERNESTO: ¿Qué estás queriendo decir, mamá?
CARIDAD: Es que no solo lo pueden acusar de asesinato… sino también de violador…
ABUELO: ¿Qué estás queriendo decir, Caridad?
CARIDAD: Acabo de ver a esa muchacha… Leonela Ferrari…

Ernesto y el abuelo están impactados.

ABUELO: ¡¡¡Ay, bendito!!! ¡¡¡Ahora si que se ha armado la de la troya!!!
ERNESTO: Esto se está poniendo muy “gacho”…
ABUELO: pero que hace esa mujer en este cas?
CARIDAD: la vi llegando, preguntando por luis Pablo...pensé que era alguien de ahi, y quise decirle lo bueno que es mi hijo....pero, cuando me dijo que se llama Leonela Ferrari, ya no pude decirle nada.

ABUELO: que cosas...!! ahora si puede estar perdido. Porque Luis Pablo si es culpable de violacion.
CARIDAD: pero él se arrepintió.
ERNESTO: Pero eso no es suficiente...si Leonela Ferrari lo acusa, dirán que tambien pudo matar a ese hombre.
CARIDAD: no...mi hijo no puede estar tanto tiempo en esa carcel...yo no podria resistirlo.

ERNESTO: las cosas no serán faciles...

La bellísima Maricaro le brinda apoyo a su esposo.

CARIDAD: ¡¡¡Así es, y por eso, creo que esa mujer lo acusará!!!
ABUELO: Esto no me está gustando nada…
MARICARO: Luis Pablo se ha metido en un grave problema… capaz que le den muchos años de carcel…
ERNESTO: Solo nos queda rezar por él…

En el rostro de los familiares hay un rostro de desesperación y angustia.

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En el Penal de Allende

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, Luis Pablo, encerrado en su celda, está recostado sobre su cama, tratando de analizar su situación…

LUIS PABLO: ¿Qué pasó? ¿Por qué de repente me tratan como si fuera un asesino? Yo solo quise defenderme… porque ese hombre quería atacarme… ¿Por qué? ¿Por qué me pasan estás cosas a mí?

A lo lejos, el “Medusita” contempla a Luis Pablo y lo mira con morbo y deseo…

MEDUSITA: Qué guapo es el nuevo reo… así me gustan los hombres… tan guapos y macizos… ¡¡¡Como me gustaría tenerlo todo para mí y yo le daría todo!!!

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Mientras, en la Mansión Ferrari


Leonela [Jimena Navarrete] sonríe…

LEONELA: Ya verás Luis Pablo Guerra… pagarás por todo lo que me has hecho…


leonela gira a su tocador. Se ve al espejo.

LEONELA: así como me hundiste a mí, y arruinaste todos mis planes esa noche en la playa....

La joven vuelve a su cama.

LEONELA: yo...Leonela Ferrari, la abogada...haré todo por hundirte en la cárcel… ¡¡¡Y finalmente se hará justicia!!!

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Al dia siguiente. en la mansión Orellan,

Ricardo [John Cusack] y Ceniel [Diane Lane] toman desayuno…

CENIEL: No veo la hora de hacer ese viaje… necesito alejarme de toda esta situación… y despejar la mente un momento… he pensado viajar en Europa. Quizas visitar a Pao, debe sentirse sola. Aunque tambien me gustaria ir a Japon, dicen que tiene cosas extraordinarias para la belleza...

Ricardo lee el periodico, y presta poca atencion a Ceniel

RICARDO: Y se puede complicar todo esto por culta de Andrés Manuel López Obrador…
CENIEL: Perdon, ¿De qué estás hablando?
RICARDO: Hablo del jefe de gobierno del Distrito Federal…del PEJE, como muchos le dicen... esas ideas populistas podrían ser un grave peligro para el país y los intereses de varios. Pienso que debemos apostar por otro candidato a la presidencia.
CENIEL: Pues, la verdad, esos temas no me interesan, ni de la politica, ni del PEJE, como le digan a ese hombre. ademas, falta mucho para la presidencia.

RICARDO: no tanto si tenemos en cuenta que faltan 5 años para las elecciones.
CENIEL: lo ves? son muchos años. Y ni apostar por alguien que aun ni se ve, pero bueno, como dije, no interesa ahora...más bien, quisiera saber como está yendo el proceso de ese hombre, el tal Luis Pablo Guerra, por el asesinato de “Pello.”

En ese momento, se aparece, la bellísima Leonela, que luce una sonrisa sarcástica…

LEONELA: ¡¡¡Buenos días, tía Ceniel… tío Ricardo!!! ¿Cómo han estado?
CENIEL: Hola, sobrina, qué bueno que vienes por aquí, ¿A qué se debe tu grata visita?
LEONELA: Quiero decirles que me haré cargo del caso de ese hombre, Luis Pablo Guerra…
RICARDO: ¿Estás loca? ¿Cómo se te ocurre realizar semejante disparate?
LEONELA: No es ningún disparate… es la mejor manera que tengo para que, finalmente, ese pobre inféliz pueda pagar por todo el daño que me hizo a mí…

CENIEL: pero, Leonela...ese hombre está acusado de asesinato, no de violacion.
RICARDO: Leonela, no creo que sea conveniente. Recuerda que no podemos ir mas allà de todo.
LEONELA: se trata de hacer justicia...ese hombre va a pagar el crimen que cometió al quitarle la vida a un empleado tuyo...y de paso, lo mio.

RICARDO: ¿Será que podrás afrontar todo esto sin dejarte llevar por sentimentalismos?
LEONELA: Por supuesto… tío… ¡¡¡Se trata de hacer justicia!!!

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Nuevamente, en el penal de Allende…

El “Medusita” se acerca a Luis Pablo y le guiña el ojo sin que Luis Pablo…

MEDUSITA: Hola, “niño bello”…

Luis Pablo trata de rechazar la presencia de ese hombre…

LUIS PABLO: Perdón, ¿No tiene otra cosa que hacer en este momento?
MEDUSITA: Solo quiero decirte que acabo de enterarme tu delito… mejor que te acostumbres aquí en este lugar porque te esperan muchos años.

LUIS PABLO: no...yo no puedo quedarme mucho tiempo. Yo debo salir.
MEDUSITA: como me han dicho, no creo.
LUIS PABLO: que le han dicho?
MEDUSITA: todo...que te acusan de asesinato, y lo mas que puedes estar es...20 años de carcel.
LUIS PABLO:no...eso no.
MEDUSITA: siento decirte que si...

luis pablo toca aquellas rejas y trata de exprimirlas con sus fuerzas. atras Medusita lo observa.

MEDUSITA: Recuerda que aquí tu nombre es preso, y tu apellido, candado. Pero, conmigo, te espera la gloria, si portas bien.

El reo afeminado vuelve a guiñarle el ojo a Luis Pablo. Es cuando él reacciona…

LUIS PABLO: No me interesa su ayuda...yo solo puedo defenderme.
MEDUSITA: enserio? tienes dinero?
LUIS PABLO: eso no...
MEDUSITA: Entonces no hables de lo que no tienes, niño bello
LUIS PABLO: que quiere conmigo? yo no quiero nada con usted!!
MEDUSITA: quizas ahora no...pero...
LUIS PABLO: tampoco luego... ¡¡¡Déjame en paz!!!

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Por su parte, Caridad se encuentra prendiéndo una velita para la salud de Luis Pablo….

CARIDAD: En el nombre del Padre, el Hijo y del Espíritu Santo. Amen. Señor, te ruego, por favor, para que salves a mi hijo… no puedo permitir verlo sufrir de esa manera… sé que ha cometido un error gravísimo con la señorita Leonela, pero, estoy segura que es inocente del crimen del porque se le imputan… he criado mucho a mi hijo y sé que él no es ningún asesino… cuídale, por favor, Señor mío, para que nada malo le pase en ese lugar lleno de malhechores y gente mala… Amén.

Mientras tanto, el abuelo llega en silla de ruedas para hablar con Ernesto, Maricaro y Genaro [Gabriel Soto]. El abuelo muestra un fajo de billetes a los demás…
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MARICARO: ¿Qué pasó, Abuelo?
ABUELO: Tengo este dinero de mis ahorros… quizás, sirva para sacar a Luis Pablo de ese lugar…
ERNESTO: Hummm… esto no alcanza para pagar la fianza…
GENARO: Veré si puedo tomar el caso como pasante…
MARICARO: Qué bueno que pudieras defenderlo, Genaro, eres la única persona que confíamos que pueda ayudar a defender su causa.
ERNESTO: Gracias, Genaro, por tu ayuda.
GENARO: No tienen nada que agradecerme. Luis Pablo es mi mejor amigo y es lo menos que podría hacer por él.

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El Guardia llama a Luis Pablo a su celda…

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GUARDIA: ¡¡¡Luis Pablo Guerra!!! ¡¡¡Usted tiene una visita de un abogado!!!

Entonces, el Guardia le abre la puerta de la celda y se dirige a la sala de visitas. El se encuentra a una mujer de espaldas, vestida muy elegante…

LUIS PABLO: Perdón, señorita, usted es…

La muchacha voltea. No es otra que Leonela mirándola con una mirada sarcástica y llena de frialdad...

LUIS PABLO: ¿Leonela? ¿Qué has venido a hacer aquí?
LEONELA: Voy a ser breve, señor Luis Pablo Guerra. Solo quiero decirle que yo seré la abogada de la acusación…
LUIS PABLO: ¿Usted va a acusarme? No lo entiendo…
LEONELA: ¿Qué es lo que no entiende, Luis Pablo Guerra? ¿Qué usted es un hombre peligroso y un peligro para la sociedad?
LUIS PABLO: ¡¡¡Yo solo me estaba defendiendo!!! ¡¡¡Ese hombre quería atacarme!!!
LEONELA: MENTIRA...!! ERES UN ASESINO. TU LO MATASTE.
LUIS PABLO: NO ES VERDAD.
LEONELA: usted es capaz de cualquier cosa con tal de lograr su cometido, y yo me encargaré de que se den cuenta de esto. No saldrá muy bien librado. Lo hundiré… lo hundiré hasta lograr que se pudre en este lugar y así pueda pagar por el crimen y la desdicha…que me hizo objeto.