Antique Amor // Capítulo 6 // ¿La novia de Antonio?

CAPÍTULO 6:
¿LA NOVIA DE ANTONIO?

Lisandro llegó al apartamento de Marina, viendo que esta estaba sirviendo la mesa. Cuándo lo vio llegar comentó:



-¡Vaya! Llegaste muy rápido. Quería que encontraras todo listo.

-No te preocupes. Te ayudo a servirla -Dijo al tiempo que llevaba unos platos hacia la mesa.

-¡No! No es necesario -Le negó Marina-. De todas maneras ya iba a terminar, mejor siéntate.

Lisandro se sentó, y desde la cocina Marina le preguntó:

-¿Y cómo te pareció tú primer día de trabajo en Antique Amor Lisandro?

-Me pareció fantástico -Respondió sonriente-. No pudo ser un día mejor porque estaba perfecto, aunque no niego que un poquito agotador. Hubo muchísimos clientes el día de hoy. Y cuéntame ¿a ti como te pareció el pastel de Doble Cubierta de Fresa que compraste?

-¡Delicioso! -Exclamó Marina, luego de servir los platos con la comida dentro y tomar asiento en el comedor- Jamás, desde que conozco Antique Amor he visto que Antonio haya vendido un pastel como el de hoy. Es que realmente estaba delicioso y lo bueno es que a mi jefe también le gustó y está pensando seriamente en rebajar el cincuenta por ciento de lo que Antonio le debe pagar a la financiera. En todo caso mejor no hablemos más de trabajo y toquemos un tema, no sé... más cálido.

-¿Y cómo de qué quieres hablar? -Preguntó Lisandro.

-Pues, no sé. Siempre he sido una mujer muy aburrida -Comentó Marina tímidamente.

-¡No digas eso Marina! -Le dijo Lisandro- No eres aburrida, todo lo contrario, eres una mujer sumamente interesante. Lo que pasa es que eres muy dedicada a tu trabajo, eso es todo, pero eso no quiere decir que seas aburrida.

-¡Que lindo eres Lisandro! -Exclamó sonrojada Marina- ¿Pero para qué decirnos mentiras? El trabajo prácticamente me está robando la vida ¿pero sabes qué? Para mí es bueno tener tiempo solo para mi trabajo. Al fin y al cabo no mantendría nada que hacer y eso es lo único que me mantiene ocupada.

-Pero Marina, la vida no puede desaprovecharse de esa manera -Le animó Lisandro-. La vida es muy corta y no vale la pena aprisionarse a cosas y miedos ilusorios. Debemos aprovechar cada momento, intentando buscar nuestro bienestar.

-¡Ay Lisandro! -Dijo Marina en un tono agobiante- Tus palabras en verdad son muy bonitas, yo he pensando muchas veces lo mismo ¿pero qué puedo hacer? Ya es muy tarde para formalizar mi vida ¿y sabes por qué? Porque he perdido tiempo valioso. Una mujer de mi edad ya está casada, a punto de tener su primer hijo, con una vida color rosa, pero mírame a mí -Y con los ojos llenos de lágrimas y forzando una sonrisa miró a Lisandro-. Yo ya no tengo tiempo para esas cosas.

-Me siento muy mal al verte así Marina -Dijo Lisandro tomándola de las manos-. No digas que no tienes tiempo, por que es mentira. Tienes aún un gran y comprometedor futuro que solo tú puedes decidir. Lo mejor es que no te agobies por esto y comamos que se nos va a enfriar la comida. ¡Vamos come!
Marina le sonrió a Lisandro, y comenzó a comer, al igual que él.

Al día siguiente, Lisandro había acabado de llegar a Antique Amor y vio a Valentín y Antonio en la caja registradora leyendo el periódico. Extrañado por eso les preguntó:



-¿Que están leyendo tan entretenidos?

-Pues el periódico ¿no ves? -Le respondió groseramente Antonio.

-Me refiero a qué artículo del periódico están leyendo -Inquirió Lisandro.

-La foto que Marina nos tomó ayer salió en la sección de consumo -Respondió Valentín.

-¿En serio? -Se sorprendió Lisandro al tiempo que se hacía al lado de los dos para leer el artículo.

-Si -Confirmó Antonio-. Al parecer el jefe de Marina quiso publicar un artículo sobre nuestro eficiente trabajo, funcionamiento y lo delicioso que le pareció el Doble Cubierta de Fresa.

-¡Vaya! -Exclamó Lisandro- Con este artículo vamos a tener muchos más clientes que ayer.

-Bueno, tú lo has dicho. ¿Qué haces aquí todavía si tendremos más clientes? -Preguntó Antonio.

Lisandro se fue inmediatamente a ponerse el uniforme de mesero, y de repente el cielo de la ciudad comenzó a nublarse y de gotera en gotera comenzó a caer una abundante lluvia. Había dos o tres clientes en la pastelería, a los que Lisandro fue a tomar la orden, mientras dos jóvenes mujeres con una camisa un tanto escotada entraron empapadas. Antonio quién acababa de salir de la cocina aliviado vio a las dos chicas y dirigiéndose a ellas de una manera muy sensual les dijo:



-Buenas tardes señoritas ¿En qué... puedo ayudarles?

-¡Ay señor! -Exclamó una de ellas- ¿Usted no tendrá algo con lo cual podamos secarnos un poco de la mojada que traemos encima?

-Claro -Respondió Antonio al tiempo que sacaba un pañuelo del bolsillo de su pantalón-. Aquí tienen.

-¿Y no nos podría prestar el baño un momento? -Preguntó la otra joven.

-Claro, adelante -Respondió Antonio sonriente-. Ni más faltaba señoritas -Y cuándo estas se dirigían al baño de la pastelería, Antonio las siguió, pero de repente Lisandro lo tomó de la oreja derecha y le dijo indignado:



-¡Oye! Un momentico ¿Tú a dónde ibas con esas mujeres?

-¡Oye! -Le dijo Antonio al tiempo que se soltaba- Primero que todo te prohíbo que vuelvas a tomarme de ese modo y segundo no te metas en mi vida. ¿Quién te ha dado ese permiso?

-Nadie me lo ha dado -Contestó Lisandro-. Solo quiero que recuperes un poquito de tu dignidad, pero por lo visto eso a ti no te importa y yo tampoco voy a ganarme nada tratando de que te conviertas en una persona madura.

-¿En verdad solo quieres eso o estás celoso de que le coquetee a esas hermosas chicas? -Preguntó Antonio con ironía.

-No, ya ves que no -Comentó Lisandro-. Solo quiero que recuperemos nuestra amistad Antonio y que olvidemos todo lo que pasó. ¿Por qué te es tan difícil comprenderlo?

-Mira Lisandro -Dijo Antonio-. Si yo te empleé en Antique Amor fue por la presión que tenía encima sabiendo que Marina ya tenía un motivo en sus manos para cerrarla y lo que no quiero es que malinterpretes las cosas. Nuestra relación es únicamente laboral y nada más. Allá tú si quieres algo más y creo que dicho esto todo está claro.

-Sí, tienes razón -Convino Lisandro decepciono-. Perdona. De todas maneras... esta es tu pastelería y puedes hacer lo que se te venga en gana. Y ahora que estamos hablando te pido un permiso para tomar aire. Me siento un poco sofocado.

-¿Pero a dónde vas si está lloviendo? -Preguntó Antonio.

-¡No me importa si está lloviendo! -Le gritó histérico- Perdón ¿Ves? Estoy como un poco ansioso, necesito respirar -Y con una falsa sonrisa en el rostro salió corriendo de la pastelería en medio de la lluvia, al tiempo que lloraba y gritaba:

-¡Te odio Antonio! ¡Te odio!

Antonio se asomó por la ventana de la pastelería, mirando a Lisandro con una mirada de lástima.

Cuándo ya estaba atardeciendo, una anciana llegó para comprar un pastel de vainilla. Lisandro lo empacó en una caja y luego dio lo que valía, aunque aquella anciana en vez de irse le comentó algo al muchacho quién aún estaba triste:



-¿Estás enamorado verdad?-Le preguntó la anciana.

-¿Cómo dice? -Se extrañó Lisandro.

-Digo que por la expresión que tienes en el rostro, estás sufriendo -Inquirió la anciana- y por amor...

-Ah, pues ahora que usted lo dice, si lo estoy, pero ya no me importa -Comentó Lisandro-. Me enamoré de alguien quién no debía y ahora estoy pagando las consecuencias con este dolor tan intenso en el pecho.

-Nadie manda en el corazón -Dijo-. El amor llega inesperadamente y no tiene consecuencias, todo lo contrario: tiene grandes frutos.

-Pero usted no entiende abuelita -Contó Lisandro-, el amor que yo siento no es normal, es horrible y jamás dará esos frutos que me dice -Y acercándosele a la anciana agregó susurrando-. Yo estoy enamorado del dueño de este lugar ¿Qué sentido tiene imaginarme que algún día ese amor va a conciliarse? Es que incluso suena... ridículo decir que existe un amorío entre dos hombres. Eso me pone muy mal porque por un lado sé que entre Antonio y yo jamás pasará nada, es duro tener que aceptarlo y por el otro está muy mal sentir esto. ¡Es incorrecto!

-Sí, ya oí suficiente. Lo único que puedo concluir es que te falta fe en el amor -Concluyó la anciana-, pero tú mismo estás matando esa fe y da como resultado tus palabras.

-Pero es que Antonio ya lo sabe todo y a él no le importan mis sentimientos -Dijo Lisandro-. Además el tiene predilección por las chicas y la única relación que existe y va a existir entre nosotros va a ser netamente laboral y por eso ya no me importa y preferiría no seguir hablando de este tema disculpe.

Lisandro volteó y se llevó la mano a la boca para evitar romper en llanto. Le dio la espalda a la anciana un breve momento, tomó aire y volvió a voltear.

-Y bueno ¿Necesita algo más?

-No muchas gracias -Contestó la anciana-. Con este pastel tengo suficiente para mi nietecita. Y piensa en lo que te dije que la esperanza es lo único que se pierde. Nuevamente muchas gracias, tienen una pastelería muy bonita y acogedora. Ya me voy, joven, muchísimas gracias.

-A la orden abuelita -Se despidió Lisandro de la anciana quién se fue finalmente de Antique Amor.

Cuándo anocheció completamente, Valentín se había acabado de ir de la pastelería y Lisandro ya estaba vestido con su ropa común, recogiendo su bolso para irse. Antonio salió de la cocina, al tiempo que apagaba las luces, pero Lisandro indiferentemente caminó a la salida sin ni siquiera dirigirle la palabra.



-¡Oye Lisandro! Espera un momento ¿A dónde vas? -Le preguntó Antonio.

-¿Pues a dónde más voy a ir? -Dijo Lisandro- Al apartamento de Marina. ¿Por qué?

-Eh, sólo era por preguntar -Respondió Antonio.

Y cuándo Lisandro estaba a punto de salir, Antonio nuevamente le retuvo preguntándole:

-¡Lisandro! Es que yo... quería... preguntarte si todo está bien entre nosotros dos.

-¿A qué te refieres? -Preguntó desconcertado Lisandro.

-Es que hoy te vi llorando afuera -Contó Antonio- después de hablamos. Lo que quería era disculparme por que acepto que fui un poco duro contigo y esa no es la manera de comenzar una buena relación laboral.

-No te preocupes Antonio -Dijo Lisandro aún con cierto tono de indiferencia-. No niego que las palabras que me dijiste me hirieron un poco, pero si lo que me quieres preguntarme es que si estoy enojado contigo, pues no lo estoy, así que por ese lado tampoco te preocupes. Además he pensado mucho todo el día y creo que lo único que debería unirnos es la relación laboral que dices.

-¿Entonces no te importa? -Preguntó Antonio.

-No, ya no me importa y no creo que vaya a importarme -Contestó Lisandro-. Lo que si me importa es tener trabajo para poder sobrellevar una vida común en esta ciudad y ayudarle a Marina con los gastos del apartamento. Y hablando de ella mejor me voy, no quiero llegar tarde para la cena.

Lisandro se fue algo triste de la pastelería y tomó un taxi. Antonio se quedó mirándolo y echó llave a la puerta. Cuándo estaba dispuesto a irse, sin mirar adelante chocó con una hermosa mujer, que usaba un vestido rojo cinco centímetros arriba de la rodilla. Antonio sonriente miró a la mujer de abajo hacia arriba y esta avergonzada por el tropiezo le dijo:



-Ay, discúlpame. No me fijaba por dónde iba ¿Te encuentras bien?

-S… si –Tartamudeó Antonio- ¡Quiero decir! Él que andaba en las nubes era yo. Estaba distraído.

-Oh, yo te vi en la sección de consumo del periódico de hoy -Comentó la mujer-. Tú eres el dueño de esta pastelería, ¿verdad?

-Si, soy yo. Antonio Guarín -Se presentó Antonio- ¿Cuál es tu nombre? -Y le extendió la mano.

-Yo me llamo Natasha Méndez -Se presentó la mujer correspondiéndole.

-No lo puedo creer, yo... yo te he visto en las noticias de entretenimiento -Dijo Antonio sorprendido-, eres modelo y hace poco saliste en la portada de la revista TVyNovelas. Sí, eres tú, Natasha Méndez.

-¡Vaya! ¡Me da mucha alegría que la gente se sorprenda de esa manera al verme! -Exclamó Natasha.

-Pero quién no va a sorprenderse con la mujer tan bella que eres -Le piropeó Antonio-. Tienes una belleza sin igual, es una desgracia que no hayas ganado el concurso de belleza del año pasado. Estarías perfecta representando el país.

-Oh, créeme que yo lo lamento más -Comentó la modelo-, pero no siempre se gana. Pero cambiando de tema venía a comprar el pastel de Doble Cubierta de Fresa que están promocionando, pero al parecer tendré que venir mañana.

-Oh claro que no -Se negó Antonio-. Espera abro la pastelería y te lo vendo... no, mejor te lo regalo.

-No, no te molestes ¿sabes qué? ¿Por qué mejor no me acompañas a tomarme un trago? -Propuso Natasha pícaramente- Y por favor no lo rechaces, en verdad necesito uno y estar acompañada de un hombre tan caballeroso y atractivo como tú. ¿Qué dices? ¿Me acompañarás?

-¿Cómo te voy a decir que no? -Respondió Antonio- Pero con una condición: Yo invito.

-Está bien  -Convino Natasha al tiempo que sonreía-. ¿Tomamos un taxi?

Mientras eso pasaba, Lisandro había acabado de llegar al apartamento de Marina, sin embargo cuándo entró con su copia de llaves, no encontró la mesa servida y vio a Marina salir de su cuarto vestida de una manera muy juvenil: el cabello suelto, el maquillaje un poco extravagante, falda corta y una camisa escotada. Se veía diferente a la joven organizada, culta y poco atractiva de siempre.



-¡Marina! -Se sorprendió Lisandro al verla vestida así.

-¡Lisandro! No te oí llegar -Dijo al tiempo que se paraba frente al espejo y peinaba su cabello-. Lamento que no hayas encontrado la cena servida, pero decidí que fuéramos a comer a otro lugar que se ajuste más a nuestra edad.

-¿A nuestra edad? -Se replicó Lisandro- Marina no entiendo nada de lo que me estás hablando. Y para empezar ¿que haces vestida así?

Y Marina se quedó quieta para contarle a cerca del nuevo rumbo que decidió tomar:

-¿Te acuerdas del tema que hablamos en la cena de anoche? Las palabras que me dijiste se me quedaron en la cabeza, prácticamente no dormí nada pensando que era lo que estaba haciendo con mi vida y descubrí que estaba culpando a mi trabajo de robarme la vida. La que no quiere o más bien la que no quería era yo. Pero ahora Lisandro... digo ¡no más! De ahora en adelante voy a aprovechar mi vida al máximo. Y apúrate, vamos a divertirnos como los jóvenes que aún somos -Y tomando su bolso de cuero abrió la puerta y salió del apartamento.

Lisandro yendo tras ella, cerró la puerta, diciéndole bastante impresionado y desconcertado:

-¡Marina espera! ¡Marina! ¿Lo que me quieres decir es que vas a dejar de un lado la mujer aburrida de la que me hablaste?

-¡Así es! -Exclamó sonriente Marina mientras intentaba tomar un taxi-. Esa Marina Díaz murió. Esta que ves aquí es una que acaba de nacer para vivir como debe ser.

Pero lo que Lisandro ni Marina esperaban era que la discoteca a la que se dirigían era la misma que Antonio y la modelo Natasha Méndez habían escogido para ir a tomarse unos tragos.





-¡Vaya Natasha! A mí jamás se hubiera pasado por la cabeza que una persona de tu clase frecuentara estos lugares -Le dijo Antonio alzando la voz para asegurarse que fuera escuchado en medio de la música a todo volumen.

-No los frecuento, son mi lugar predilecto -Contestó Natasha también alzando la voz e intentando bailar al son de la música electrónica que sonaba.

-¿Y entonces qué quieres tomar? -Preguntó Antonio.

En ese mismo instante, Lisandro y Marina también habían llegado a la discoteca. Marina alzaba los brazos y gritaba de una manera indecente:



-Uuuuuuh ¡Vamos Lisandro!

-¿Marina estás segura que quieres quedarte en este lugar? -Preguntó Lisandro.

-¡Como nunca! -Respondió- Y ya no hagas más preguntas tontas que esto era exactamente lo que necesitaba ¡Ven!

Y Marina tomó a Lisandro de la mano para adentrarlo más a la discoteca, repleta de personas bailando y bebiendo licor en medio de las luces color neón. Repentinamente, Lisandro vio a Antonio de lejos, besarse con Natasha cerca de la barra.

-Antonio -Dijo Lisandro asombrado por que lo veía.

CONTINUARÁ...

Mañana te leo

No te preocupes Joana, cuando puedas

Gracias.

Ay no pobrecito de Lisandro, aunque  él sabe que Antonio es un imposible pues ha de haber sentido horrible cuando lo vio besándose con Natasha.

Por otro lado Marina se está haciendo ilusiones con Lisandro y él que no ha podido aclararle que está enamorado de Antonio.

Antonio no se porque me late que en el fondo como que si siente algo por Lisandro, no se si porque fueron amigos en el fondo lo sigue queriendo así como su amigo y es solo que lo desprecia porque se siente ofendido al saber que Lisandro lo ama, o si es el ego de Antonio que en el fondo siente orgullo, satisfacción de sentir que Lisandro lo ame y esto le mueve el tapete y por eso mismo lo rechaza porque quiere demostrarse así mismo que lo desprecia.. Así que solo tendré que continuar leyendo los siguiente capítulos para así darme cuenta cuales son los verdaderos sentimientos de Antonio, si es que le tiene miedo a Lisandro por lo que siente por él o si se tiene miedo así mismo por lo que él pueda sentir por Lisandro.

En espera del siguiente capítulo

Mm me da que Antonio va a enamorarse de Lisandro y el tonto no le dice nada aún a Marina de que es gay

Esperamos el próximo a ver como avanza

CiberGloria escribió:Ay no pobrecito de Lisandro, aunque  él sabe que Antonio es un imposible pues ha de haber sentido horrible cuando lo vio besándose con Natasha.

Por otro lado Marina se está haciendo ilusiones con Lisandro y él que no ha podido aclararle que está enamorado de Antonio.

Antonio no se porque me late que en el fondo como que si siente algo por Lisandro, no se si porque fueron amigos en el fondo lo sigue queriendo así como su amigo y es solo que lo desprecia porque se siente ofendido al saber que Lisandro lo ama, o si es el ego de Antonio que en el fondo siente orgullo, satisfacción de sentir que Lisandro lo ame y esto le mueve el tapete y por eso mismo lo rechaza porque quiere demostrarse así mismo que lo desprecia... Así que solo tendré que continuar leyendo los siguiente capítulos para así darme cuenta cuales son los verdaderos sentimientos de Antonio, si es que le tiene miedo a Lisandro por lo que siente por él o si se tiene miedo así mismo por lo que él pueda sentir por Lisandro.

En espera del siguiente capítulo

Hola Gloris!

Muchísimas gracias por pasarte a leer y comentar . Y por opinar. Pues la expresión de Lisandro no podía ser otra que de sorpresa al ver a Antonio besarse con otra chica que resultó ser Natasha. Y sí, como bien dices, Marina cada vez se ilusiona más con Lisandro sin imaginarse sus inclinaciones . ¿Qué podría pasar cuando se entere? .

Qué buena deducción diste de lo que siente Antonio por Lisandro . Pues hasta el momento eso queda en incógnito. Antonio es muy orgulloso, puede que no esté aceptando sus sentimientos por Lisandro. Hay que ver que ellos fueron amigos en el pasado y seguro se sintió ofendido y asustado cuando Lisandro le salió con que le gustaba como dices. Pero ya con el correr de los capítulos te irás dando cuenta .

Gracias! Pronto el capítulo 6.

Joana escribió:Mm me da que Antonio va a enamorarse de Lisandro y el tonto no le dice nada aún a Marina de que es gay

Esperamos el próximo a ver como avanza

Hola Joa...

Muchísimas gracias por pasarte a leer, comentar y opinar este capítulo . Pues todavía no sabemos los verdaderos sentimientos de Antonio por Lisandro, ¿será que si se enamora de él? Y Marina cada vez se ilusiona más con Lisandro, se enamora. ¿Cuál irá a hacer la reacción de ella cuando se entere que su amado es gay? . Averígualo continuando capítulo a capitulo Antique Amor

Gracias. Pronto el siguiente capítulo.

Pues sí ,pobre Marina que la caída será más dura…

Así es. Ya verás con el correr de los capítulos .

Gracias y saludos

Excelente capítulo Aleja Antonio siente algo de lástima por Lisandro, ojalá cambie su actitud pero qué...... No sé la palabra jajajaja xD. Se fijó en esas dos chicas que entraron a Antique Amor y ahora está saliendo con Natasha que se ve que es muy coqueta. Hasta besándose están!!! Lisandro se va a decepcionar mucho

Qué bueno que Marina cambió y ya es un poco diferente. Entonces a todos les gustó el nuevo sabor de pastel de la pastelería y eso es lo que no ve y agradece Antonio .

Mañana me pongo a la corriente Aleja si Dios quiere .

Saludos.

Muchas gracias Danni por comentar y leer . Pues aunque Antonio es bastante mujeriego (creo que esa es la palabra que buscabas) no le gusta hacerle daño a los demás y por eso le dio lástima de Lisandro al ver que lloraba.

Es verdad. Le has atinado a Natasha. Ella es muy hermosa y bastante coqueta .

Sí, Marina cambió por la conversación que tuvo con Lisandro. Ya dejará a un lado un poco la amargura.

Gracias. Esperaré entonces tus comentarios

Que mal x Lisandro. ahora Natasha se cruzará en su camino.

Así es Andrés. Natasha vino y no con buenas intenciones. Ya verás qué papel cumplirá en la historia .

Gracias por leer y comentar.