Capitulo 14: Reynaldo le confiesa su amor a Diana

En la comisaría.
En los pasillos, Reynaldo, Gabriel y Diana.
DIANA: ¿Que pasó?

Reynaldo suspira abatido.

GABRIEL: Veremos si eliberan a Irma, pero tratandose de homicidio no lo creo.
MARCOS: (viene) Ya hablé con Ortega. La situación de Irma está bastante complicada. Aníbal se declaró inocente y le echó la culpa 100% a Irma, así que ahora Irma es la asesina ante los ojos de las autoridades.

En ese instante llega Rodolfo.

RODOLFO: ¿QUEE??
REYNALDO: Voy a matar a Aníbal. No me importa si me detienen.
RODOLFO: Puedo ver a Irma?
REYNALDO: ¡Claro! Le haría mucho bien.

Rodolfo va a la celda de Irma.

GABRIEL: Será mejor que vallamos a la compañia. Todo tiene que seguir su curso normal.
DIANA: ¡Vamos!

Reynaldo, Diana y Gabriel van a la compañia.

MARCOS: Yo iré a ver que puedo hacer.

***

Celda de Irma.
Rodolfo se acerca. Primero se le ven los pies.
IRMA: ¿Tú??
RODOLFO: (se acerca y le coje las manos) ¡Irma!
IRMA se aparta.
RODOLFO: ¡Perdoname! ¡Perdoname por comportarme como un imbécil. (le dan las lagrimas)
IRMA: Me heriste demasiado... Sufrí mucho por tu culpa... (llora) Vienes a verme hundida ¿no?
RODOLFO: Noo... (llora) Viné a estar a tu lado. ¡Perdoname!
IRMA: Quue fácil para ti ¿no? Vienes a pedirme perdon... ¿y qué? crees que se me olvida tan rápido tu mal trato?
RODOLFO: Tienes razón en todo... fui un imbécil. (llora)
IRMA: ¡No llores! (se acerca y le seca las lagrimas) ... (le toca las manos)
RODOLFO: (le acarisia las manos sonriendo) ¿Me perdonas?
IRMA: Ok... (suspira) te daré una nueva oportunidad, pero es la última.
RODOLFO: ¡Gracías mi amor! (se acerca y la besa por entre las rejas como se puede)
OCTAVIO: ¡Ya terminó la visita!
RODOLFO: (se separa y sonríe) No te preocupes que pronto vas a salir, mi amor!

Irma y Rodolfo se separan. Rodolfo se va.


***

Barrio de Diana.
Saúl estaba manejando lentamente y pensaba en sus cosas. Sofía cruza la calle y no se fija si viene algún coche. Agustín viene a la casa de Diana. Saúl despierta de repente y frena a unos centimetros de Sofía. Agustín ve y se acerca.
SAUL: (sale del coche y se acerca a Sofía) ¿Estás bien? ¡Perdoname! No prestaba atención. (le mira los ojos)
SOFIA: (le mira los ojos también) No se preocupe... estoy viva ¿no? (le sonríe)
SAUL: ¡Sí cláro! ¡Ay! que verguenza me da. Me va a considerar un torpe...
SOFIA: No, para nada. A cualquiera le puede pasar. Por suerte no pasó a mayores...
SAUL: ¿Cómo se llama usted?
SOFIA: Sofía... ¿y usted?
SAUL: Sofía... ¡que nombre tan bonito! Yo soy Saúl.
AGUSTIN: (se acerca) ¡Sofía! ¿Estás bien?
SOFIA: (oye a Agustín y se separa de Saúl) Si.. Saúl se acaba de disculpar...
AGUSTIN: (abraza a Sofía y se queda mirando con odio a Saúl) ¡Para la próxima fijate por donde manejas!
SAUL: Es mi culpa... acepto! Pero le ofrecí disculpas...
SOFIA: No te preocupes, Agustín! No me pasó nada!
AGUSTIN: (lo ve con odio) ¿Qué esperas? ¡Vete!
SAUL: Si claro..

Saúl sube a su auto y arranca. Queda mirando a Sofía y se va. Sofía lo mira hasta que su coche se aleja.

AGUSTIN: (celoso) Te gustó el fanfarón ¿no?
SOFIA: ¿Y qué tiene de malo? Ambos nos gustamos... estoy soltera, así que puedo enamorarme de quien me plazca. ¡Con permiso!

Sofía va a su casa.

AGUSTIN: (quedó solo) Tú no te puedes enamorar de nadie más. Tengo que hacer algo o la pierdo.


***

En el coche de Saúl.
SAUL: Sofía... Y ese que llegó será su novio? De seguro... ¡No! Ni que pensar en eso...

***

En la compañia.
Oficina de Reynaldo.
Diana le trae un café.
DIANA: ¡Su café doctor!
REYNALDO: ¡Pasa Diana!

Diana entra y cierra la puerta.

REYNALDO: ¿Te puedo pedir un favor?
DIANA: ¡Claro!
REYNALDO: ¡Hablame de tú porfavor! (se levanta y se arregla el traje)
DIANA: Pero... usted es mi jefe...
REYNALDO: (se acerca a ella y le coje las manos mirandole a los ojos) Me gustas mucho, Diana! Desde el primer instante en que te ví no puedo dejar de pensarte.
DIANA: (le mira los ojos) Este... yo...
REYNALDO: Yo sé que tú sientes lo mismo. Lo veo en tus ojos. ¿Me permites hacer una cosa que siempre he querido hacer desde que te conocí?
DIANA: (lo mira enamorada) ¿Qué es lo que quiere hacer?
REYNALDO: (se acerca a ella, le acarisia la cara y le besa tiernamente) ¡Esto! (la besa) Te amo Diana!
DIANA: (se deja besar) Pero... tienes novia... y... yo también tengo novio... ¿qué van a decir?
REYNALDO: Cristal es muy posesiva... pero... yo no la amo... (le coje las manos nuevamente) Diana... ¡dame una oportunidad y juro hacerte la mujer más felíz del mundo!
DIANA: Está bien... pero tendremos que hablarlo con Agustín y no creo que le va a gustar...
REYNALDO: Lo hablarémos juntos con él! ¡Gracías por esta oportunidad! Te juro que no te voy a lastimar núnca. (la besa)
DIANA: (le corresponde al beso) Puz... ¿vamos a hablar con Agustín?
REYNALDO: ¡Vamos! (le coje la mano)

Reynaldo y Diana se van.


***

Casa de Diana.
Doña Providencia estaba en casa de una vecina.
AGUSTIN: (celoso) ¿Que fue eso Sofía?
SOFIA: ¿Eso que?
AGUSTIN: Ese... coqueteo ¡maldita sea!
SOFIA: ¿Cuál coqueteo? Saúl sólo me pidió disculpas... no manejaba con atención, pero por suerte no pasó a mayores.
AGUSTIN: ¡Te lo comías con la mirada!
SOFIA: Bueno... no puedo negar que es un hombre muy guapo, pero... ¿y tú de que te preocupes? Eres el novio de mi hermana y yo estoy soltera...
AGUSTIN: ¿Sabes de lo que me acaba de dar cuenta?
SOFIA: ¿De qué?

Suena el timbre.

SOFIA: ¿Quién? (va y abre) ... (ve el ramo de rosas rojas)
AGENTE DEL CORREO: ¿La señorita Sofía Ruíz?
SOFIA: ¡Soy yo!
AGENTE DEL CORREO: ¡Para usted! ¿Me firme aquí porfavor? (le da papel y pluma)
SOFIA: ¡Sí, cláro! (firma)
AGENTE DEL CORREO: ¡Gracías! (coje sus papeles y se va)

Sofía le firma, coje el ramo y el agente de correo se va. Sofía cierra la puerta. Ella mira la tarjeta.

" Cuando miré tus ojos supe que eres la mujer de mi vida. ¡Te amo!
Esta noche vendré por tí y me gustaría que aceptes mi invitación a cenar. Saúl... "

Sofía suspira y pone las flores en un florero.

AGUSTIN: ¿Y eso? (celoso) Son de ese tipo ¿no?
SOFIA: ¡Sí! ¿que tiene de malo?
AGUSTIN: ¡Maldita sea Sofía! No puedo vivir más sin decirtelo. (la coje por la cintura y la pega a él) ¡Te amo! No lo quize reconocer pero es a ti a quien amo!
SOFIA: ¡Sueltame! (intenta separarse) Es muy tarde! Te diste cuenta muy tarde...
AGUSTIN: (la lleva hasta la pared sin dejarle escapatoria; ella estando entre su cuerpo y la pared) ¿Por qué? No puedes negar que no te gusta ese fanfarón imbécil!

Sofía lo ve como núnca antes.

AGUSTIN: ¡Dimelo! Dimelo ¡maldita sea! ¿Estás enamorada del fanfarón?
SOFIA: Sí! Sí! Sí! Me gusta Saúl y pienso salir con él.
AGUSTIN: (celosisimo, la coje por los brazos y la tira al sofa acostandose encima de ella) Está bien... pero te juro que el imbécil no te va a disfrutar primero! (se acuesta encima de ella y le rompe la blusa haciendo que los botones se rompan) ¡Hoy mismo vas a ser mía! (intenta besarle a la fuerza)
SOFIA: ¡Sueltame! (llorando)

Suena el timbre.

AGUSTIN: (se levanta) Esto no queda así! ¡Vete y vistete!
SOFIA se levanta llorando.
Agustín se acomoda la ropa y abre la puerta.
Sofía va a su cuarto. Agustín ve a su novia de la mano con Reynaldo.
AGUSTIN: ¿Qué es esto, Diana? (más loco de celos)