Capitulo 30: Reynaldo celoso

(Diana vió a Reynaldo y estaba a punto de cerrarle la puerta en la naríz cuando él empuja la puerta y entra. Desde que se separaron, Reynaldo no para de beber.)
REYNALDO : Mi amor… me tienes que perdonar!
DIANA : (con la puerta abierta) ¡Lárgate de mi casa! Tú y yo no tenemos nada de que hablar! Además estás borracho!
REYNALDO : (tambaleandose) Sí, tienes razón! Estoy borracho, pero de amor por ti! (se acerca a besarla)
DIANA : (voltea) ¡No me toques que apestas! Y ¡lárgate!
REYNALDO : (con lágrimas; borracho) Por Dios, entiendeme! No tengo nada que ver con Cristal… ¡Te amo! (la coje por la cintura pegandola a él tratando de besarla)
DIANA : (en sus brazos) ¡Sueltame! (le pega en los brazos, pero no se puede soltar) ¡Sueltame ya o no respondo!
SAUL : (llega con el jugo) Ya llegó el jugo jeje! (ve a Diana tratando de separarse de Reynaldo) ¡Sueltala ya!
(Reynaldo escucha a Saúl y le suelta a Diana.)
REYNALDO : (borracho) ¿Y tú de dónde apareciste? No me digas que andas de calentito con mi mujer?
DIANA : (le da una cachetada a Reynaldo) ¡Estás borracho y no sabes lo que dices! Entre Saúl y yo no hay ni habrá nada, por Dios! Es el novio de mi hermana.
SAUL : No cabe duda que estás tomado! Estás loco! Debería sacarte a patadas de aquí, pero no lo pienso hacer por respeto a Sofía y a Diana!
REYNALDO : ¡Vamos, atrevete a sacarme! (lo reta)
SAUL : Está bien, tú lo quisiste así.
(Coje del cuello de la camisa a Reynaldo y lo empuja hacía la puerta. Reynaldo, con lo borracho que estaba se cae al sofá y del sofá al suelo.)
REYNALDO : Esto no se va a quedar así! (se levanta, pero se cae nuevamente)
DIANA : ¡Ya, Reynaldo, porfavor! No armes un escándalo aquí en mi casa! Vete y lo hablamos después ¿si?
(Aparece Sofía.)
SOFIA : ¿Qué pasa aquí? (ve a Reynaldo) ¿Reynaldo?
REYNALDO: Ahora yo soy el malo del cuento ¿no? Pues muy bien. Me voy! Pero te juro que núnca mas me volverás a ver. No me pienso humillar más ante ti! Si no me quieres creer haya tú!
DIANA: Mira, Reynaldo! Núnca he hablado más enserio! No me busques más! Trata de ser felíz con Cristal y con tu hijo que yo trataré de sobrevivir sin ti!
REYNALDO : ¿Ves? Aún me amas…
SAUL: Perdón que me meto, Diana. (a Reynaldo) ¡Deja de presionarla! Será mejor que vuelvas con tu mujer y con tu hijo. ¿Qué parte de lo que te dijo no entendiste?
REYNALDO : Mira, imbécil, tú no tienes vela en este entierro ¿entiendes? Así que ¡no te metas!
SAUL : Me meto porqué me da la gana! Como su cuñado está en todo mi derecho proteger a Sofía y a su hermana. Así que vamos ¡fuera!
DIANA : Reynaldo, vete porfavor!
REYNALDO: Me voy… (a Saúl) pero no porqué tú me lo dices, sino porqué Diana me lo está pidiendo. (a Diana) Núnca te olvides que te amo!
(Reynaldo sale triste y cierra la puerta. Diana va detras de él para cerrar la puerta. Por sus mejillas corren lágrimas.)

* * *
Mansión Díaz Castro.
Habitación de Gabriel.
Gabriel viene de la oficina. Chantal está viendo la televisión. No perdía ni un capítulo de ‘Dobles Parejas’.
GABRIEL : Belleza, te tengo una noticia!
CHANTAL : ¿Qué noticia? Te hiciste el examen y podemos tener un hijo?
GABRIEL : Aún no, cariño. Pero te lo prometo que dentro de muy poco me lo voy a hacer. De momento, solo te puedo decir que prepares tus equipajes que pasado mañana saldrémos para los Estados Unidos.
CHANTAL : ¿Te vas ahora?
GABRIEL : (la corrije) ¡Nos vamos! Tú te vienes conmigo como mi esposa.
CHANTAL : ¿Me vas a llevar en tus viajes de negocios?
GABRIEL : ¡No te hagas la estúpida, belleza! Este no es un viaje de negocios. Nos mudamos para los Estados Unidos. Mejor dicho para Miami. Me voy a mudar con la constructora en Miami. Me salió un nuevo socio que vende su parte allá y yo se la voy a comprar.
CHANTAL : ¿Y yo que voy a hacer con mi hermana?
GABRIEL : Tu hermana estará bien quedandose con mi hermano Reynaldo. Se pueden venir en la luna de miel a pasarlo con nosotros en Miami. Y… (se acuesta en la cama a su lado y le acarisia las piernas y las pompas) hasta podemos encargar un bebé allá. Allá me hago las pruebas necesarias y lo encargamos. ¿Qué dices?
CHANTAL: (suspira) Está bien. Ps ni modo ¿no? (se levanta y coje su bata para vestirse) Voy a hablarlo con mi hermana.
GABRIEL : (se levanta) Está bien. Y yo mientras me doy un baño.
(Chantal sale de la habitación y Gabriel se desnuda y se mete al baño.)



* * *
Mansión Díaz Castro.
Habitación de Cristal.
Cristal salió de la ducha. Vestía una bata blanca, sexy. Salió de la ducha y se sentó en la cama. Encendió la televisión porqué estaba por comenzar ‘Desgracia para Todos’. Alguien toca a la puerta.
CRISTAL : ¡Adelante!
(Por la puerta entra su hermana Chantal.)
CRISTAL : Ah, éras tú!
CHANTAL : Sí… ¿quién pensabas que éra?
CRISTAL : No pensaba que me venías a ver. Vivimos en la misma casa y nos vemos tan raro. Pero bueno… ¿qué pasó esta vez?
CHANTAL: Vengo avisarte que me pienso ir con Gabriel del país. Irémos a los Estados Unidos a empezar una nueva vida.
CRISTAL : Ay ¡que bien! Me alegro por ustedes! Ojalá Reynaldo y yo nos casemos y vayamos de luna de miel a visitaros.
CHANTAL : Ojalá, hermana! Te deseo lo mejor!
CRISTAL: ¡Gracías! Sé que estás siendo sincera. Pero lo dudo mucho ya que Reynaldo no se puede sacar de la cabeza a esa secretaria de mil demonios.
CHANTAL : ¿Aún sigue detras de esa? Ps sí que mal rollo el tuyo!
CRISTAL : Te cuento algo? Tarde o temprano tendrá que olvidarse de esa desgraciada y casarse conmigo. Porqué estoy esperando un hijo suyo… (se toca el vientre)
CHANTAL : ¿Qué? ¿De verdad? ¿Ya lo encargaste?
CRISTAL : Sí. Pero… ¿te cuento la verdad? Tengo dudas con respecto a mi hijo. Puede que el bebé sea de Aníbal.
CHANTAL : ¿¿Qué?? No me digas que… ¿te acostaste con Aníbal?
CRISTAL : Me conviene aliarme con él. Solo juntos podemos vencer a esa secretaria de mil infiernos. Y que manera más buena que pasar al hijo de Aníbal como hijo de mi futuro marido?
CHANTAL : ¡Eres una zorilla! Jajaja (rísas) Si Reynaldo se entera es capáz de mandarte por un tubo.
CRISTAL : Pero nadie lo sabe. Solo tú. Y no creo que mi propia hermana sea capáz de traicionarme. Es más, tú ya te vas. Por cierto… ¿cuándo te vas con tu marido?
CHANTAL : En dos días. Gabriel consiguió que un socio le venda su parte y va a montar una sucursal de la constructora en Miami.
CRISTAL : ¡Qué os vaya bien, hermana!
CHANTAL : ¡Gracías! Y suerte a ti también que lo vas a necesitar ¡eh!
CRISTAL : ¡Lo sé! Cuando me case con Reynaldo, os irémos a visitar!
CHANTAL: ¡Cláro, allí os esperamos!

* * *
Casa de Diana.
Todos terminaron de cenar. Doña Providencia va a su recámara a descansar. Diana recoge los trastes. Sofía y Saúl andan de cariñosos.
SAUL : Mi amor ¿qué te parece si nos vamos al cine?
SOFIA : Mmm… una excelente idea, mi amor! Solo dejame cambiarme y ponerme algo sexy para mi principe y ya vengo jeje.
SAUL : Aquí te espero, mi amor!
(Sofía va a su recámara a cambiarse. Diana lavaba los trastes. A Saúl le suena el célular.)
SAUL : Bueno?! … No, no me he olvidado del plan, pero lo siento mucho. Esta noche tengo otros planes. Si quieres nos vemos mañana ¿vale? … No te enojes conmigo ¡porfavor! … Está bien, mañana te lo pago con creces. … ¡Adiós!
(Diana oyó que Saúl hablaba por telefóno y viene.)
DIANA : Mira, Saúl, te voy a decir unas cosas!
SAUL : ¡Cláro, cuñada, dime!
DIANA : Si hablaste con alguna mujer, y esa mujer significa algo para ti, será mejor que rompas todo contacto con mi hermana! No quiero que mi hermana sufra como yo. No quiero que la hagas sufrir como Reynaldo me hizo a mí!
SAUL : Cláro, Diana, entiendo como te debes de sentir, pero yo con Susana no tengo nada que ver. Solamente somos amigos. Y me pidió que salgamos a tomarnos un trago para festejar que ya soy un hombre libre, nada más! Pero yo amo a tu hermana, de eso no lo dudes!
DIANA: Está bien, yo nada más te lo dije.
(Aparece Sofía.)
SOFIA : ¿Qué pasa, Diana? (a Saúl) Ya estoy lista, mi amor!
SAUL: Mmm… ¡estás lindísima, mi amor! ¡Ven acá! (la coje por la cintura y le de un beso dulce) ¿Vamos?
SOFIA : ¡Vamos! (a Diana) ¡Adiós, hermana! No me esperes que llego tarde!
DIANA: Está bien… ¡cuidate!
(Sofía y Saúl se van. Diana queda a terminar de lavar los trastes y después se irá a dormir.)

* * *
Cuarto de hotel.
Irma y Rodolfo, desde que se fueron de la mansión, rentaron un cuarto de hotel para tener dónde vivir. Pero con la parte de la herencia que le corresponde, Rodolfo piensa comprar un bonito departamento para los tres : Irma, él y el bebé que nació hace poco.
El bebé está dormido en su cuna. Irma está sentada en la cama, viendo despasito las noticias en la televisión. Rodolfo sale de la ducha.
RODOLFO : ¿Cómo están mis Piojos amados? (se sienta en la cama y besa a Irma)
IRMA : ¡Shh! (le pone un dedo en la boca y lo besa) El niño apenas se durmió, no lo vayas a despertar!
RODOLFO : (despasito) Mmm… está bien, mi amor.
(Rodolfo se acuesta al lado de Irma.)
RODOLFO : Mi amor… estaba pensando en algo.
IRMA : ¿En qué, mi amor?
RODOLFO : Sé que no debería pedirtelo de esta forma, pero ¿qué te parece si nos vamos a casar? ¡Escoge tu la fecha! Me gustaría pasar el resto de mis días con la mujer que amo y con mi hijo. (vuelve a besar a Irma)
IRMA: Sí, acepto, mi amor! (sonríe y lo besa también) Y la fecha… ps cuando tú quieras. No creo que hay apuros!
RODOLFO: Está bien, mi amor.
(Los dos se unen en un tierno beso.)



* * *
De noche.
En la playa.
Sofía y Saúl caminan de la mano por la arena. El mar estaba tranquilo, el aire de la noche está fresco.
SAUL : Te traje aquí para escuchar la noche, mi amor. El sonido del mar relaja mucho.
(Los dos se detienen y Saúl abraza por detrás a Sofía.)
SAUL : ¡Te amo, mi amor! ¡Mi Sofía!
(Saúl le besa el cuello tiernamente a Sofía. Ella se estremece entre sus brazos, se da le vuelta, rodea con sus brazos el cuello de su amado y le besa dulcemente los labios. Se detiene un poco para mirarlo a los ojos.)
SOFIA : ¡Y yo a ti, mi amor! Te voy a amar por siempre y para siempre!
(Se vuelven a unir en un solo beso intenso y apasionado. Saúl le baja despasito la blusa, mientras que con sus manos recorre el cuerpo de su amada. Se deja despasito encima de ella en la arena, su mano protegiendo la espalda de la joven. Sus labios no se separan ni un solo segundo. Sofía lo sigue besando con la misma intensidad mientras le acarisia el cuerpo musculoso. Como está debajo de él, mientras le besa apasionadamente, le quita la camisa. Saúl se termina de quitar la camisa, le mira intensamente los ojos a su amada y continua besandola, mientras le quitaba la blusa y la falda. Cuando le quitó la falda, sus manos recorrían el cuerpo esvelto de su amada. Sofía se estremecía de placer cada vez más entre sus brazos, mientras le acarisia la espalda a su enamorado.
Los dos se amaron horas y horas fundiendose en un solo cuerpo. Se llenaron de besos y de amor hasta quedarse dormidos los dos debajo del cielo lleno de estrellas, y con el ruido de las olas del mar que golpeaban la playa. Y así se quedaron abrazados toda la noche.)



* * *
Departamento de Susana.
Susana estaba en su dormitorio, durmiendo. Tenía una pesadilla porqué estaba toda sudada.
SUEÑO :
Susana estaba soñando la boda de Saúl con Sofía. El cura estaba preguntando :
CURA : Sofía Ruíz ¿aceptas por esposo a Saúl Robles?
SOFIA : Sí, acepto, padre.
CURA : Saúl Robles ¿aceptas por esposa a Sofía Ruíz?
SAUL : Sí, padre, acepto.
CURA : Si hay alguien que se oponga a este matrimonio que hable ahora o calle para siempre!
(Aparece Susana interumpiendo la boda.)
SUSANA : ¡Yo! ¡Yo me opongo! (a Saúl) Saúl, tú no te puedes casar con esta insipida! Tú me amas a mí! ¡A mí! (gritando) ¡A mí!
SAUL: (después de mirar a Susana, vuelve a mirar a Sofía luego al cura) Sigue, padre!
CURA : Os declaro marido y mujer. Puedes besar a la novia!
(Saúl besa a Sofía.)
FIN DEL SUEÑO.
(Susana despierta sudada y gritando.)
SUSANA : ¡Noooo! (se levanta a medias) ¡No! Tú no te puedes casar con esa!